El empresario Elon Musk celebra este 28 de agosto un evento para presentar los resultados del trabajo de su compañía de neurotecnología Neuralink Corporation, que desarrolla un dispositivo para crear una conexión entre el cerebro humano y un computador.

Durante su transmisión en directo, que tuvo lugar en la sede de la empresa en la ciudad de Fremont (California), Musk mostró un cerdo llamado Gertrude que tenía implantado en su organismo un chip especial, llamado ‘Link’ y del tamaño de una moneda. Tras ser conectado a un computador, el dispositivo transmitió información sobre su actividad cerebral.

Musk mostró a los espectadores una pantalla que reproducía un sonido y mostraba un pico visual cada vez que el dispositivo detectaba que Gertrude tocaba algo con su hocico mientras buscaba comida.

«El dispositivo inicial es de lectura/escritura en todos los canales, con aproximadamente 1.024 canales. La duración de la batería es de todo el día, se recarga durante la noche y tiene un alcance bastante largo, por lo que puede tener alcance en su teléfono», señaló. «Debo decir que eso es algo importante, porque esto se conectaría a su teléfono, por lo que la aplicación estaría en su teléfono y el Link se comunicaría, esencialmente por Bluetooth de baja energía, con el dispositivo en su cabeza».

«Es como un Fitbit en tu cráneo con pequeños cables«, dijo Musk sobre el dispositivo.

Gertrude no fue el único puerco que participó en el evento. Además se pudo observar a otro cerdo que no fue tratado y a un tercero que, aunque previamente había tenido el chip instalado, luego se lo quitaron. Musk enfatizó que la importancia de mostrar a este último, con aspecto normal y saludable, consistia en demostrar la posibilidad de extraer el implante de manera segura, debido a que con el tiempo se planea proporcionar actualizaciones al hardware a medida que estén disponibles mejores versiones.

Asimismo, el empresario enseñó al robot que, según se espera, realice la cirugía para insertar el en el organismo humano. Indicó que se prevé que el procedimiento se lleve a cabo durante menos de una hora y sin el uso de anestesia general. El paciente podrá abandonar el hospital el mismo día, afirmó. Musk recalcó que el dispositivo el Link V0.9  es muy pequeño, desolo 23 x 8 milímetros, y puede ser implantado directamente en la corteza craneal superior de una persona.

Musk hizo hincapié en que el propósito de toda la presentación era la contratación y no la recaudación de fondos, ni ningún otro tipo de promoción.

«No estamos intentando recaudar dinero ni hacer nada más. El objetivo principal es convencer a grandes personas para que trabajen en Neuralink y nos ayuden a llevar el producto a buen puerto, hacerlo asequible y confiable, y que cualquiera que lo quiera pueda tenerlo», comunicó el empresario.

«Arreglar casi todo lo que funciona mal en el cerebro»

A comienzos de este año, el magnate aseguró que el artefacto podría implantarse por primera vez en una persona a finales de 2020. No obstante, reconoció que a su compañía le quedaba «un largo camino» para implementar exitosamente la interfaz y lograr la producción en masa y posterior implantación del producto.

El objetivo de Musk con Neuralink es integrar el cerebro humano con un intelecto artificial y hacer que ambos trabajen en simbiosis. Para ello, un robot neuroquirúrgico —parecido a la combinación de una máquina de coser y un microscopio — implantaría 6 hilos con 192 electrodos por minuto. El conjunto implantado podría contener hasta 3.072 electrodos repartidos en 96 hilos. En caso de que esa interfaz se haga realidad, tendría enormes implicaciones en la «restauración de la función sensorial y motora y el tratamiento de trastornos neurológicos», explica la empresa en un documento técnico.

En mayo, Musk dijo que esta tecnología podría potencialmente «arreglar casi todo lo que funciona mal en el cerebro» y permitiría a las personas con parálisis controlar con su pensamiento computadoras, teléfono y miembros artificiales u otras prótesis. Además, subrayó que también ayudaría a curar trastornos como la epilepsia.

A principio de este mes, el empresario comentó que los implantes cerebrales permitirían oír sonidos que de momento no están disponibles para nuestros oídos y que podrían asimismo hacernos «controlar niveles hormonales y usarlos en nuestro beneficio».

(RT)