El empresario Álex Saab denunció a través de una carta, que diariamente está siendo torturado por agentes pagados por Estados Unidos para que realice declaraciones falsas contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y para que firme su extradición «voluntaria» hacia el país norteamericano.

El portal español El Mundo informó este miércoles -2 de septiembre- que tuvo acceso «exclusivo» a una carta escrita por Saab desde la celda en donde lo mantienen encerrado de forma irregular en la isla africana de Cabo Verde, país que lo detuvo a petición de Estados Unidos sin respetar su inmunidad diplomática.

«Estados Unidos tiene a cuatro empleados que entran en mi celda cada noche y me muelen a golpes para que haga declaraciones falsas contra Maduro (…) He sido torturado para declarar contra Nicolás Maduro y firmar mi extradición voluntaria a Estados Unidos», dice parte de los extractos de la carta reseñada por el medio español.

En la misiva, Saab recuerda que es un enviado especial de Venezuela a Rusia e Irán, razón por la cual dispone de inmunidad diplomática y exige su liberación.

El empresario resalta que a pesar de las torturas a las que es sometido diariamente, no va a aceptar bajo ningún concepto que lo obliguen a decir mentiras sobre Maduro y mucho menos a que lo trasladen a Estados Unidos.

«Fui torturado durante dos días con vistas a que firmara declaraciones y me negué (…) El propósito de estos delincuentes, es que firme la extradición voluntaria a Estados Unidos y haga declaraciones falsas contra el presidente Maduro y su familia», sostiene Saab, quien añade que «ni con sangre» está dispuesto a «firmar esas mentiras y calumnias contra un presidente que lucha por salvar a su pueblo en medio de un bloqueo inhumano».

El Gobierno de Donald Trump acusa a Saab, sin tener pruebas, de un supuesto blanqueo de 350 millones de dólares procedentes de «actos de corrupción» que atribuye al presidente venezolano a través del sistema financiero americano.

Por esta razón, el empresario fue detenido el pasado 12 de junio cuando su avión hizo escala para repostar en el aeropuerto internacional de Amilcar Cabral de la isla de Sal, la más importante de Cabo Verde.

El arresto se produjo a petición de Estados Unidos, a pesar de que aún no estaba lista la alerta que -un día después- emitió la Interpol por supuesto lavado de dinero.

De hecho, la defensa de Saab sostiene que la orden de Interpol es falsa porque está fechada un día después de su detención y considera, por tanto, que carece de validez alguna.

«Soy diplomático desde abril de 2018 como enviado especial de Venezuela para Rusia e Irán con inviolabilidad e inmunidad diplomáticas y exijo mi liberación inmediata», reclama Saab en la carta, donde reiteró que fue «detenido arbitrariamente en Cabo Verde y bajado del avión privado en el que viajaba».

«Iba a Irán en visita oficial en busca de alimentos, medicinas y gasolina para aliviar una crisis empeorada por el Imperio (…) La gasolina llegó a Venezuela, como anunciaron todos los medios, despertando aún más el odio de EEUU», enfatiza el empresario.

(LaIguana.TV)