La policía de Colombia informó este miércoles 2 de septiembre sobre el supuesto arresto de tres venezolanos en Bogotá y una mujer en Barranquilla por estar aparentemente implicados en la denominada Operación Gedeón, la cual fue desarticulada por las autoridades venezolanas el pasado 3 de mayo.

La agencia de noticias The Associated Press (AP) publicó en un artículo la captura de Yacsy Álvarez, quien se desempeñó en Colombia como traductora y asistente del jefe de los mercenarios entrenados en esa nación, Jordan Goudreau. La noticia fue confirmada previamente por el diario El Tiempo.

El resto de los arrestados en la capital colombiana fueron identificados como Rayder Alexander Russo y los hermanos Juvenal y José Sequea Torres.

“Los tres hombres fueron arrestados en allanamientos simultáneos la madrugada del miércoles en la capital Bogotá, dijo a AP una persona que estaba en contacto con los hombres al momento de su arresto”, citó la fuente.

“La persona que insistió en el anonimato para discutir la continuación de la investigación dijo que los tres fueron detenidos por cargos de tráfico de armas y entrenamiento para realizar actividades ilícitas”, aseguró.

Al parecer, dos de los hombres, el mayor Juvenal Sequea y el capitán Juvenal Sequea, son los hermanos mayores del comandante de la fallida incursión, el Capitán Antonio Sequea, detenido en Caracas.

“El tercero, Rayder Ruso, es un civil que durante mucho tiempo ha buscado el derrocamiento del presidente Nicolás Maduro. Los tres hombres vivieron durante meses en campamentos rústicos a lo largo de la costa caribeña de Colombia”, publicó AP.

En dichos cuarteles improvisados, el veterano de guerra estadounidense Goudreau estaba entrenando a los mercenarios que invadieron las costas venezolanas, aseguró la agencia.

“El FBI ha estado entrevistando a asociados de la empresa de seguridad de Goudreau como parte de su propia investigación, para saber si violó o no las leyes estadounidenses, al vender armas, equipo militar, entrenar y asesorar a extranjeros”, publicó.

Esta detención de los denominados por la prensa colombiana «cerebros de Gedeón», vale destacar, ocurre meses después del hecho y en un momento de tensión social en el vecino país, por la ola de masacres y el regreso de la violencia a manos de grupos organizados y ante la mirada inerte del presidente Iván Duque, por lo que no se descarta que la sorpresiva aprehensión sea un falso positivo como los ya aplicados desde el vecino país hacia Venezuela.

(LaIguana.TV)