Este domingo 13 de septiembre las playas de Ipanema y Copacabana, ubicadas en Brasil, estuvieron abarrotadas de visitantes en medio de la pandemia  mundial por la COVID-19, aun cuando el llamado “gigante del Sur” se ubica como el tercer país con mayor cifra de contagios con más de 4,3 millones de casos confirmados.

De acuerdo con un reportaje de agencias internacionales de noticias y citado por El Comercio los visitantes no acataron, ni respetaron las normas sanitarias establecidas: el distanciamiento, el uso obligatorio de mascarillas, entre otros.

Aunado a esta situación, medios de comunicación indicaron que se generaron asaltos colectivos en estas playas.  

Balance por COVID-19 en Rio de Janeiro

De acuerdo con EFE  y Xinhua, Río de Janeiro se convirtió en una de las ciudades  con más afectaciones como consecuencia de la COVID-19, tanto que su sistema de salud y funerario se vio comprometido y estuvo a punto de colapsar.

La capital carioca retomó en gran parte sus actividades cotidianas, pese a que logró presentar un gran número de víctimas fatales, luego de Sao Paulo.

El Ministerio de Salud informó que hasta este sábado 12 de septiembre el estado de Río de Janeiro contabilizaba 240.776 casos de contagios y registraba 16.985 fallecidos.

Acuerdos internacionales para la vacuna

“El Gobierno de Brasil y otras entidades locales ya establecieron acuerdos internacionales para probar, producir y comercializar las diferentes iniciativas inmunológicas que están siendo desarrolladas en el Reino Unido, China, Rusia, Estados Unidos y Alemania», reseñó El Comercio.

Leve baja en la tasa de fallecidos por COVID-19

Brasil permaneció por más de dos meses con una tasa alta por encima de los mil decesos diarios por COVID-19, no obstante, a partir del 7 de septiembre, la tasa bajó a aproximadamente 800 por día.

Experto habla sobre caída de media diaria de muertes: “Es muy pronto para sacar conclusiones”

En este orden de ideas, el profesor de medicina e investigador Antonio Silva Lima aseguró a Xinhua que la disminución “de la media diaria de muertes en Brasil” causadas por  la pandemia pudiera ser celebrada, sin embargo, «es muy pronto para sacar conclusiones, (…),  pero debe ser algo muy pautado por criterios objetivos, como la caída de la tasa de contagios, que tiene que ser constante, y que los indicadores epidemiológicos de casos y muertes se mantengan a la baja durante un largo plazo, lo que garantice que tengamos una cierta seguridad en el caso que haya algún rebrote en alguna área de Brasil».

Por último, el profesor de medicina en la Universidad de Fortaleza, Silva Lima explicó  al medio asiático, a través de  un contacto telefónico: «Cuando analizas a Brasil como un todo, un país continental que vive epidemias distintas y que ahora parecen equipararse, parece que ahora hay una estabilidad, pero esta estabilidad tiene diferencias. Hay áreas en las que el virus circula todavía con alguna constancia, y otras donde está muy restringido, las llamadas ‘bolas’, donde no hubo o ya no hay transmisión».    

(LaIguana.TV)

La playa de Ipanema en Río de Janeiro (Brasil).  Foto EFE

La pandemia del nuevo coronavirus comenzó a dar tímidas señales de ralentización en Brasil. Foto EFE