Un médico de nombre Carlos Javier Villanueva, conocido en Twitter como @ConotoLlanero, fue engañado por una jovencita que se hacía pasar por una mujer adulta llamada «Mariángel», conocida en la misma plataforma digital como @Maghero.

Durante varios meses, el galeno y «La llanerita», como se apodaba «Mariángel», sostuvieron un romance virtual, que revolucionó las redes sociales entre el 24 y el 26 de septiembre, cuando se reveló que la mujer había fallecido a consecuencia de la COVID-19, según recoge el portal especializado en periodismo de datos e investigación La Tabla.

De acuerdo con la pesquisa realizada por el referido medio, el pasado 26 de octubre, «el romance ‘digital’ –del cual existían, para el momento, registros en la cuenta de @ConotoLlanero– transcurrió entre versos y contrapunteos, saludos de buenos días y bendiciones en la noche», pero la semana del 21 al 26 de septiembre, el idilio se vio amenazado porque «La Llanerita» informó que se había contagiado con el coronavirus.

Villanueva le envió «mensajes de aliento y de confirmación del inmenso amor», pero el jueves 24, tras no haber podido hablar con «Mariángel» desde el miércoles en la noche, preocupado por su estado de salud, solicitó a los internautas información de contacto de algún familiar de su «novia» e incluso relató que «había visitado todos los hospitales de Maracay y no la conseguía».

Posteriormente, le informarían que «La llanerita» había sucumbido por la COVID-19 y, visiblemente afectado, le escribió una «carta de despedida» en Twitter que inmediatamente atrajo la atención de los usuarios que habían estado siguiendo el curso del «romance», malogrado por causa de la muerte.

Como señala La Tabla, «en la clásica telenovela, los finales más frecuentes son la boda o la muerte. Los finales felices son previsibles y aburridos. Los tristes y hasta crueles despiertan pasiones y garantizan el ‘rating’. Así fue el de ‘La llanerita'».

Empero, pronto saldría a la luz el timo del que, en su buena fe, fue víctima Carlos Javier Villanueva, pues un internauta curioso descubrió que el deceso era falso y que «Mariángel» no existía, sino que era un personaje creado por una joven, usando fotografías de una tía con la que guarda gran parecido físico.

El portal especializado refiere, asimismo, que la «twitter-audiencia» descubrió que la sobrina de la mujer –que no era «Mariángel»– cuya identidad fue usurpada, efectivamente había fallecido por COVID-19, con base en una confirmación que escribiera un presunto «hermano mayor» de la víctima en «el timeline», sin ofrecer más detalles.

Esta información no pudo ser verificada, toda vez que la cuenta que usaba «La llanerita», @Maghero, fue cancelada. 

El afectado difundió un comunicado en Twitter, en el que explica que conoció a «Mariángel» en Twitter y tras empatizar, iniciaron una relación «amena», que durante cuatro meses se sustentó en el intercambio llamadas telefónicas, SMS, fotografías y mensajes de WhatsApp, si bien reconoce que nunca se contactaron por videollamada.

«Fue una relación amena, pero como toda relación a distancia, fue una relación de poca profundidad. Solo tenía dos números telefónicos, cero contacto con personas cercanas», detalla.

Villanueva aclaró que se enteró del «deceso» de «La llanerita» a través de un mensaje de WhatsApp escrito, según creyó entonces, por la mamá de «Mariángel» y se sintió destrozado. En este momento, asume que «poco puede aclarar» sobre su fallecimiento.

«Si llegase a saber algo más de esta situación aún confusa y no aclarada para mí, si llegase a saber que existió tal como se me dio a conocer, y si realmente falleció, entonces viviré el dolor que he sentido, pero hasta el momento, quizá todo apunta a que ha sido el peor engaño que haya podido experimentar», reza el texto divulgado.

(LaIguana.TV)