Interpol ha emitido una alerta roja para arrestar a Vorayuth Yoovidhya, heredero del imperio Red Bull, acusado del atropello mortal a un policía en Bangkok en 2012 antes de huir en su Ferrari, según el informe de la policía tailandesa.

El anuncio en julio de que la policía había retirado los cargos contra el nieto del fundador de la marca de bebidas energéticas causó un gran revuelo. Su caso se ha convertido en un símbolo de los privilegios otorgados a la élite del país y el logo de Red Bull esgrimido en las protestas estudiantiles para exigir más democracia.

Ante la presión, a principios de agosto se inició una nueva investigación y se emitió una nueva orden de arresto contra Vorayuth Yoovidhya por «conducción imprudente con resultado de muerte» y consumo de cocaína.

El portavoz de la policía, el coronel Krissana Pattanacharoen, confirmó el domingo que Interpol ha emitido una alerta roja esta semana, un procedimiento para pedir a las fuerzas del orden de todo el mundo que localicen y arresten a Vorayuth Yoovidhya.

«Hemos pedido su ayuda a 194 países miembros», dijo. «Debemos hacer lo que sea necesario para traerlo a casa porque es un delito grave». Dejó el país en 2017 en su jet privado y desde entonces no se sabe dónde está.

De primeras el nieto de Chaleo Yoovidhya negó los hechos, pero después terminó reconociendo que iba al volante. Fue enjuiciado por el atropello y la fuga, y después puesto en libertad. Terminaron por retirar los cargos en su contra en julio después de llegar a un acuerdo económico con la familia del policía.

(AFP)