En medio de la campaña presidencial por la jefatura de la Casa Blanca, el tema Venezuela y la supuesta «protección» que ofrece el régimen de los Estados Unidos a los venezolanos en ese país es parte principal del discurso de ambos candidatos.; pero ¿qué tan cierta es la política favorable para los migrantes venezolanos en territorio estadounidense?

Un despacho de la agencia de noticias española EFE confirmó que a pesar de los discursos, tanto del candidato demócrata Joe Biden, como el del republicano y actual presidente, Donald Trump, a favor de los venezolanos, la política estadounidense anti-inmigrantes sigue golpeando fuerte a los venezolanos que se encuentran en ese país y que terminan siendo deportados a pesar del bloqueo unilateral impuesto por Washington de vuelos hacia y desde Venezuela.

El pasado 16 de octubre, el senador demócrata Bob Menéndez denunció que el Gobierno de Trump se valió de terceros países para seguir deportando a migrantes venezolanos, una estrategia que le sirvió supuestamente para esquivar una prohibición de vuelos a Venezuela que él mismo decretó en 2019.

Menéndez, quien no deja de abonar en la campaña contra Venezuela y el Gobierno de Nicolás Maduro, afirmó que las deportaciones de Trump contra venezolanos se produjeron al menos hasta marzo de 2020 y aseguró que los vuelos con origen en Estado Unidos hacían escala en Trinidad y Tobago antes de llegar a Venezuela.

Ante esta realidad, el senador republicano Marco Rubio propuso este lunes -26 de octubre- al presidente Trump, que marque a los inmigrantes venezolanos en el país con «el beneficio» conocido como Salida Obligatoria Diferida (DED, en inglés), una medida que los obliga a salir de Estados Unidos pero después de un tiempo, y en el cual pueden tener permiso para trabajar para su sostenimiento.

Expulsión segura

Según Rubio, este «beneficio» permite que las personas vivan durante un período limitado antes de ser deportados a su lugar de origen.

En la misiva enviada a Trump, Rubio, quien preside el Subcomité de Relaciones Exteriores para el Hemisferio Occidental del Senado, animó al gobernante estadounidense a ejercer su «autoridad constitucional» para conceder una DED solamente «a los nacionales venezolanos elegibles que residen actualmente en Estados Unidos».

«Tal designación es consistente con – y promueve- las prioridades de la política exterior de su Administración con respecto a Venezuela, así como el apoyo a nuestros vecinos», aseguró Rubio, quien es senador por Florida, uno de los estados clave en las elecciones del 3 de noviembre, con una importante población de venezolanos y cubanos.

«El DED provee una suspensión administrativa temporal de la expulsión para los nacionales de los países designados por el presidente», acotó Rubio; y les permite «trabajar legalmente en el país durante la duración de la designación».

Complicidad del lobby de Guaidó

La propuesta de Rubio que busca estigmatizar a los venezolanos en Estados Unidos y obligarlos a salir del país luego de un tiempo, fue aplaudida por Carlos Vecchio, el autodenominado «embajador» del lobby de Juan Guaidó para el Gobierno de Trump.

«Mientras salimos de la dictadura de Maduro, es necesario un mecanismo (TPS o DED) que permita vivir y trabajar legalmente a venezolanos en EE UU sin temor a ser deportados», dijo Vecchio en su cuenta de Twitter.

Para captar el voto de migrantes venezolanos en Estados Unidos, Trump, quien promueve a Juan Guaidó como supuesto «presidente interino» -aunque con algunas dudas y discrepancias-, ha radicalizado el bloqueo total contra Venezuela y su industria petrolera -principal fuente de recursos del país- al profundizar las medidas coercitivas unilaterales que agravan la calidad de vida de los venezolanos al ser víctimas de restricciones como las que vive el pueblo de Cuba desde hace más de medio siglo.

(LaIguana.TV)