El «enviado especial de Estados Unidos para Venezuela e Irán», Elliott Abrams, dijo que se encuentra preocupado por el futuro de todas las acciones que ha hecho la administración de Donald Trump contra Venezuela, sobre todo porque cree que el presidente electo, Joe Biden, podría «relajarse» en la aplicación del bloqueo total y la imposición de medidas coercitivas contra el Gobierno venezolano que preside Nicolás Maduro.

En una entrevista con Reuters, Abrams dijo que «hay un fuerte consenso bipartidista en Washington sobre la necesidad de mantener la presión sobre Maduro y que no espera grandes cambios de política en Estados Unidos cuando Biden asuma el cargo el 20 de enero».

Por tal razón, pidió al futuro gobierno de Joe Biden que «use la influencia que cree que se ha obtenido con las duras sanciones destinadas a desalojar del poder al presidente Nicolás Maduro» y le pidió que no le ofrezca ningún “obsequio”.

Sin embargo, Abrams comentó que «siempre» le «ha preocupado” que el gobierno demócrata pueda «relajarse con Maduro», aunque no ha visto señales de eso en Biden y sus asesores. En cambio, instó a que mantenga una aplicación estricta de las sanciones.

Abrams también amenazó con más sanciones de Estados Unidos contra cualquier responsable de “fraude electoral” en las elecciones al Congreso, programadas por orden constitucional para este domingo 6 de diciembre en Venezuela.

“Realmente están contra la pared”, dijo Abrams, refiriéndose al impacto económico de las sanciones. “Y tenemos mucha influencia; deberíamos usarla (…) Mi consejo (al gobierno de Biden) sería no darles regalos a Maduro”.

Según Reuters, un portavoz del equipo de transición de Biden declinó hacer comentarios.

Por ahora, describe Reuters, «Biden y sus asesores no han señalado un cambio dramático en el enfoque de Washington hacia Maduro, que se ha basado en un amplio programa de sanciones que limita las exportaciones de petróleo de Venezuela y dificulta a los ciudadanos estadounidenses hacer negocios con el gobierno en Caracas».

Añaden que «se espera que Biden busque una mayor coordinación con sus socios, ya que podría afrontar presión para flexibilizar algunas medidas, incluidas las restricciones a las importaciones de gasolina de Venezuela por razones humanitarias en medio de la pandemia de coronavirus».

(LaIguana.TV)