La denominada «cruz de la muerte» estuvo a punto de aparecer este miércoles en el gráfico de las cotizaciones del bitcóin.

Se trata de un patrón técnico que consiste en la intersección de dos líneas, una formada por el precio promedio móvil de 50 días y la otra, por el de 200 días. Tradicionalmente, se considera un importante indicador de una futura caída. En particular, se observó al inicio de las crisis bursátiles de 1929, 1938, 1974 y 2008, recuerda Investopedia.

Esta vez, la cruz de la muerte casi se hizo presente después de que el promedio móvil de 50 días del bitcóin cayera de 37.616 a 33.342 dólares y el de 200 días creciera de 28.647 a 33.218 dólares en un día.

A pesar de esta aparición del patrón, los analistas aclaran que este hecho no equivale obligatoriamente a una fuerte y prolongada caída. En particular, la última vez que se registró fue en agosto del año pasado, pero entonces la criptomoneda se recuperó en semanas.

«La última cruz de la muerte no fue el fin del mundo, pero provocó un retroceso del 15 %. [El bitcóin] tardó 50 días en recuperar su precio. Desde el nivel actual […], un retroceso del 15 % pondría al bitcóin en alrededor de 28.000 dólares «, cita el portal Bitcoinist a expertos de la empresa TradingShot.

Por su parte, el director ejecutivo del operador de cambio de criptomonedas CEX.IO, Konstantin Anissimov, opina que la demanda por parte de los inversionistas a largo plazo hará que el bitcóin no caiga por debajo de los 31.500 dólares.

«La demanda está creciendo, mientras que la tasa de producción de la moneda es bastante baja, lo que podría hacer que la moneda suba a 50.000 dólares para finales del primer trimestre de este año», predijo el experto.

En diciembre y a inicios de enero, el bitcóin vivió un impulso alcista sostenido de su valor, alcanzando un récord de 42.000 dólares tras subir desde marzo pasado más de un 800 %. No obstante, el 11 de enero su cotización cayó un 17 % y actualmente se vende por alrededor de 33.110 dólares.

(RT)