El nuevo secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, ordenó a los comandantes y supervisores de la Fuerza Armada de ese país, un día de paro en el servicio dentro de los próximos dos meses, para reforzar la lucha contra el extremismo de derecha entre los miembros de la institución militar.

La orden se atribuye al violento asalto al Capitolio de Washington D.C. del pasado 06 de enero y su importancia radica en la necesidad de un “entorno libre de discriminación, odio y acoso” entre los miembros del servicio, los empleados civiles del departamento de Defensa.

«No toleraremos acciones que vayan en contra de los principios fundamentales del juramento que compartimos, incluidas las acciones asociadas con ideologías extremistas o disidentes», expresa el escrito.

De acuerdo con el jefe del Pentágono, esta medida es el primer paso en lo que «debe ser un esfuerzo concertado para educarnos mejor a nosotros mismos y a nuestra gente sobre el alcance de este problema y para desarrollar formas sostenibles de eliminar los efectos corrosivos que la ideología extremista y conducta tienen en la fuerza laboral».

Austin y el presidente del Estado Mayor Conjunto, el general Mark Milley, se reunieron con líderes civiles y militares para abordar el tema del extremismo entre los militares.

Dicha resolución fue anunciada el pasado miércoles para buscar intensificar la lucha contra el extremismo de derecha entre los miembros activos de las Fuerzas Armadas.

Recordemos que el asalto al Capitolio pretendía impedir el recuento de votos del Colegio Electoral que le daría el triunfo al demócrata Joe Biden, quien asumió la presidencia el pasado 20 de enero.

(LaIguana.TV)