Durante un repaso por las graves consecuencias de la deforestación en países de América Latina como Brasil y Colombia, el filósofo y comunicador Miguel Ángel Pérez Pirela, en su programa Desde Donde Sea, analizó el grave escenario en Argentina, donde la pérdida de bosques puede llevar a su erradicación en solo unas cuantas décadas.

Citando al ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Argentina, Juan Cabandié: “Solo en 2020 se perdieron 400 mil hectáreas de bosque nativo: 300 por incendios y 100 por deforestación. De seguir así, nos quedaremos sin bosques nativos en los próximos 70 años”, fue la grave advertencia del miembro del Ejecutivo de ese país.

Por otra parte, Pérez Pirela recordó que estos signos de devastación ambiental avanzan “de forma preocupante justo en el momento en que la OMS declara la región en alerta sanitaria planetaria por la COVID-19, en especial, por la cepa brasileña que está matando a personas de 40 años en 72 horas”.

A partir de ver como un elemento determinante la deforestación en la aparición y expansión de nuevos virus, recordó: “Ya hay nuevas cepas a lo largo y ancho del planeta y hay nuevas medidas de confinamiento a nivel mundial. Ya hay tres variante de la COVID-19 circulando en el mundo que son más peligrosas que el resto de las cepas: la del Reino Unido, la sudafricana y la cepa originada en Brasil, esta última con un juego de mutaciones adicionales que podrían afectar su capacidad de ser reconocida por los anticuerpos, según estudio de los Centros para el Control y la prevención de las Enfermedades en España”.

De acuerdo con el también director de LaIguana.TV, el filósofo Enrique Dussel, en sus conferencias sobre ética, no le da a la humanidad la posibilidad de supervivencia por más de 200 años en el planeta, de persistir las presentes condiciones.

Concluyó Pérez Pirela que atacar la pandemia pasa por revisar las políticas humanas y ambientales, más allá de resolver el problema de la enfermedad: “Dejemos la estupidez supina de caer en las matrices de opinión que piensan que la COVID-19 es el virus chino (…). La causa de la COVID-19 es estructural, consecuencia de los desvaríos del ser humano, la industria alimentaria y la deforestación”.

(LaIguana.TV)