Pedro Pierluisi, gobernador de Puerto Rico, abogó por la inclusión de la isla como el estado número 51 de los Estados Unidos, alegando los resultados favorables que obtuvo la propuesta en un referéndum no vinculante realizado en noviembre, reporta EFE.

«Durante años el Congreso ha ponderado la idea del estatus político de Puerto Rico, pero no ha actuado. Las cosas son diferentes ahora: el 3 de noviembre, los puertorriqueños votaron para resolver ese estatus«, dijo Pierluisi en una audiencia ante la Cámara de Representantes del Congreso Estadounidense.

La agencia española precisa que entonces, «el 52,5 % de los votantes apoyó entonces la opción de estadidad y, según Pierluisi, ahora al Congreso federal le toca decidir si acepta a Puerto Rico como el miembro 51 de la Unión», un resultado, que en su juicio, disipa toda duda acerca del estatus que debe adoptar el país, derivado, además, de un procedimiento que se asemeja al que «otras entidades han tenido antes de convertirse en estado».

Según esta fuente, el representante Raúl Grijalva (demócrata), quien preside el Comité de Recursos Naturales, tuvo una audiencia en la que se discutieron dos proyectos de ley relacionados con tema: de un lado, la ley H.R. 1522 en la que se contempla la incorporación de Puerto Rico a los Estados Unidos; del otro, la H.R. 2070 que «reconoce el derecho del pueblo de Puerto Rico para convocar una convención mediante la cual la ciudadanía ejercerá su derecho a la autodeterminación».

Nydia Velásquez, representante demócrata por el estado de Nueva York y promotora de la ley H.R. 2070, alegó que «el Congreso debe tomar la responsabilidad de entrar en un diálogo con el pueblo de Puerto Rico». La iniciativa cuenta con el respaldo de «al menos 76 demócratas en la Cámara de Representantes».

Desde el punto de vista de la autoridad antillana, «el proyecto de ley de autodeterminación no impone un resultado sino que permite la discusión plena del estatus, incluidas la estatidad, la libre asociación, la independencia» y, en contraste, en la H.R 2070 se incluyen «opciones que los puertorriqueños ya han rechazado».

«Esto es el epítome del colonialismo e ignora lo que el pueblo ya votó. Le dice a los puertorriqueños cuál ha de ser el proceso para que expresen su autodeterminación», cuestionó Pierluisi.

Posteriormente, en su cuenta de Twitter, el mandatario celebró el encuentro y lo valoró como parte de la lucha de su pueblo por su autodeterminación.

«Hoy elegimos estar en el lado correcto de la historia, defendiendo los principios de la democracia, luchando por la igualdad y respetando la voluntad del pueblo de Puerto Rico», reza su trino.

Desde 1898, Puerto Rico es un Estado Libre Asociado de los Estados Unidos, un estatuto que le permite a la isla tener su propia constitución y algún grado de autonomía en las decisiones de gobierno, aunque Washington es quien tiene la última palabra acerca de temas estratégicos como la migración, la moneda, la defensa o las aduanas.

El debate sobre su anexión al territorio estadounidense se avivó luego del paso del huracán María en 2017 –que causó unas 4.645 muertes y más de 90.000 millones de dólares en daños–, afectó seriamente y durante meses el acceso de más del 90% de la población a servicios esenciales como el agua potable, la electricidad, el combustible y la telefonía celular.

Pese a la gravedad de la situación y a la declaratoria de Zona de Desastre Federal, la administración Trump fue tarda para responder a la emergencia y en lugar de ofrecer ayuda económica, aprobó un fondo de 4.900 millones de dólares en préstamos para atención de urgencias mínimas.

(LaIguana.TV)