Excesos, abusos de poder, represión y brutalidad al momento de reprimir las protestas ha sido la denuncia y el foco de las críticas internacionales más recurrentes en contra de la policía colombiana, desde el inicio de las manifestaciones el 28 de abril.

De acuerdo con una nota publicada por el diario El País, el exceso de la fuerza policial documentado por la organización de derechos humanos Human Rights Watch, incluye el uso de un lanzador de cohetes y disparos por la espalda contra personas desarmadas, capturados en videos de los propios manifestantes y residentes del lugar de las protestas.

Estos hechos de violencia policial han ocasionado 14 víctimas mortales, según Human Rights Watch. Mientras que el total de fallecidos en estas manifestaciones en varias ciudades del país, han superado los 50, según reseña un medio local.

Ante las múltiples denuncias las autoridades colombianas solo han detenido a tres policías, mientras que doce se encuentran bajo investigación.

Por su parte, el Gobierno de Iván Duque justificó la actuación violenta de los uniformados señalando que ellos también han sido atacados por vándalos organizados. Según Duque, hay un policía muerto y más de mil heridos.

Entre tanto, Duque en medio de la coyuntura enmarcada en la crisis social y económica en el país, ha responsabilizado sin prueba alguna al senador colombiano Gustavo Petro de las protestas.

“Cuando yo gané las elecciones, el candidato que derroté dijo que él estaría en las calles todo mi mandato, que iba a protestar todo mi mandato, que su propósito era no dejarme gobernar el país”, aseguró Duque, durante una entrevista concedida a un medio internacional privado. 

(LaIguana.TV)