Wendy Sherman, subsecretaria de Estado de los Estados Unidos anunció este jueves que se reunió con Julio Borges, quien está solicitado por las autoridades de Venezuela por su participación en un intento de magnicidio en contra del presidente Nicolás Maduro y figura como pseudorepresentante de asuntos internacionales de Juan Guaidó, bajo el amparo de Washington.

Sherman indicó en Twitter, que en el encuentro se ratificó el «respaldo de Estados Unidos para rescatar la democracia en Venezuela y abordar las necesidades humanitarias del pueblo venezolano».  

En el primer caso, la funcionaria omitió que Guaidó, a quien la administración Biden insiste en reconocer como «presidente interino», figura inexistente en la Constitución de Venezuela, de hecho usurpa funciones y ha atentado reiteradas veces contra la democracia en el país, al protagonizar intentos de golpes de Estado y suscribir un contrato con una compañía mercenaria estadounidense para ejecutar una incursión armada con la que pretendía deponer al gobierno del presidente Nicolás Maduro.

En el segundo, la subsecretaria de Estado no admite que el deterioro en las condiciones de vida de la población venezolana es consecuencia directa de las medidas coercitivas unilaterales que los gobiernos de Barack Obama y Donald Trump impusieron paulatinamente sobre Venezuela desde 2015, como puede comprobarse a partir de informes elaborados por expertos independientes como la relatora especial de las Naciones Unidas, Alena Douhan, o Alfred de Zayas, quien formó parte del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.

En su trino, la diplomática también hizo referencia al eventual proceso de negociación que se entablaría entre el Gobierno Bolivariano y el ala antidemocrática de la oposición, a la que pertenece Borges.

En ese orden, instó, haciéndose eco de la postura de sus «aliados internacionales», a que «se celebren negociaciones amplias con plazos concretos», de cara a conseguir la realización de «elecciones libres y justas», un discurso que ha sido repetido sin variaciones desde hace varios meses por Guaidó y otros políticos del sector que adversa a Maduro desde posiciones extremistas y que se niega a participar de la vida institucional de la nación.

(LaIguana.TV)