Según informó el viernes el diario brasileño Folha de Sao Paulo, el asesor de la Seguridad Nacional de EEUU, Jake Sullivan, de visita en Brasil, habría ofrecido a altos cargos del Gobierno del Jair Bolsonaro a entrar a formar parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) bajo el estatus del “socio global”, a cambio de que Brasilia reconsiderara en sus relaciones tecnológicas de movil con China. 

El medio señala que el alto funcionario estadounidense emprendió su primer viaje a Brasil con el objetivo de discutir asuntos de cooperación en materia de defensa y seguridad, así como la deforestación del Amazonas y el suministro de vacunas para la lucha contra el nuevo coronavirus, causante de la COVID-19, con destacados miembros del Ejecutivo brasileño. 

La perspectiva de que Brasil se una a la alianza militar, liderada por EEUU, como un “socio global” bajo condición de que sacara a la compañía china Huawei de su mercado de la quinta generación de tecnología móvil (5G) para remplazarla con una tecnología estadounidense, habría surgido durante el encuentro mantenido entre Sulivan y el ministro de Defensa brasileño, Walter Braga Netto. 

El reporte agrega que los detalles pormenorizados de esta propuesta se los dio el estadounidense al ministro brasileño de Comunicaciones, Fabio Faria, asegurándole que era posible promover la tecnología US Open RAN, como una herramienta para desarrollar capacidades inalámbricas similares al 5G de Huawei en el mercado del gigante sudamericano. 

Sin embargo, Folha de Sao Paulo destacó que existía un cierto grado de divergencia dentro de la cúpula del mando, encargada de supervisar, velar y garantizar por el correcto funcionamiento de los sistemas de seguridad brasileño. 

El órgano del Gabinete Ejecutivo que asesora a Bolsonaro sobre seguridad nacional y defensa, aparentemente está a favor de aceptar la oferta de Washington, pero otros oficiales militares han expresado sus dudas sobre el tema, detalla el texto. 

Estos últimos argumentan que nunca se ha registrado ningún problema con Huawei en las más de dos décadas que la firma china ha estado operando en el país, lo que contradice las alegaciones de Washington de que Huawei espía para China y no respeta los derechos de propiedad intelectual. 

De esta iniciativa estadounidense se conoce en un momento en el que el propio Bolsonaro ha estado sopesando prohibir a que el gigante tecnológico Huawei suministre componentes para la próxima red 5G de Brasil. 

El Gobierno de Pekín ha denunciado, en reiteradas ocasiones, las infundadas acusaciones de espionaje de EEUU contra Huawei, mientras atribuye las amenazas de Washington a otros países para cerrar las puertas de sus redes nacionales 5G a la empresa china a su temor por el gran avance tecnológico de la compañía. 

(HispanTV)