El papa Francisco aseguró que se encuentra bien y «hace vida normal» después de su operación de colon, que tiene previstos varios viajes y que ni se le «pasó por la cabeza» renunciar al pontificado, en una entrevista concedida a la radio española COPE.

En la entrevista de hora y media a la emisora de la conferencia episcopal española, el papa dio detalles de su operación, de la que le extirparon «33 centímetros de intestino» y acalló los rumores sobre su salud y sobre una posible renuncia.

Afirmó que fue un enfermero que trabaja desde hace 30 años en el servicio sanitario quien «le salvó la vida» porque le dijo: «Usted tiene que operarse», a pesar de que le habían aconsejado otras opciones como curarse con antibióticos.

Pero confirmó que ahora está muy bien, lleva «una vida normal» y «puede comer de todo», aunque todavía tiene que tomar medicación porque, explica «el cerebro tiene que registrar que tiene 33 centímetros menos de intestino».

Sobre si la operación afectará a su próximo viaje a Budapest y Eslovaquia del 12 al 15 de septiembre, reconoció que «quizás en este primer viaje un poco más, porque uno tiene que reponerse del todo», pero «al final va a ser igual que los otros, ya lo va a ver».

E incluso explicó que además de su viaje a Glasgow (Reino Unido) en noviembre para participar en la cumbre del clima, conocida como COP26, también tiene previsto en su agenda viajar a Chipre, Grecia y Malta y que deja abierta la puerta a una visita a Santiago de Compostela (España) por el Año Santo Xacoveo, aunque en Europa solo elige países pequeños.

EL PAPA: «NUNCA SE ME PASÓ POR LA CABEZA RENUNCIAR»

Sobre los rumores de renuncia que publicó un diario ultraconservador italiano, explicó que se enteró «mucho después», cuando se lo comentó una periodista de Cope, y que «nunca» se le había «pasado por la cabeza».

«Siempre que un Papa está enfermo corre brisa o huracán de cónclave», aseguró.

El pontífice se mostró muy sorprendido: «¡Yo no sé de dónde han sacado la semana pasada que yo iba a presentar mi renuncia! ¿Qué palabra habrán tomado en mi patria? De ahí salió la noticia».

«Y dicen que fue un revuelo, cuando a mí ni se me pasó por la cabeza. Delante de interpretaciones que nacen un poco distorsionadas de alguna palabra mía yo me callo, porque aclarar es peor», añadió.

(EFE)