Tras la toma de Kabul (capital de Afganistán) por el grupo armado Talibán, miles de personas pudieron abandonar el país en una caótica evacuación, debido a que miraron el futuro de su patria con miedo en medio de la crisis también provocada por la salida apresurada de las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), encabezada por Estados Unidos.

De hecho, el Reino Unido ha sido uno de los destinos de estos refugiados bajo la llamada Operación Cálida Bienvenida, lanzada el 29 de agosto por el primer ministro británico, Boris Johnson, para ayudar a los que llegan al país, brindándoles apoyo para que pudieran “reconstruir sus vidas, encontrar trabajo, continuar su educación e integrarse en sus comunidades locales”.

No obstante, el diario británico The Guardian indicó el sábado que, dada una falta generalizada de viviendas, los hoteles han sido confiscados como alojamiento temporal de emergencia para 7000 refugiados afganos, y según los funcionarios del Ministerio británico del Interior, algunos permanecerán en ellos durante meses. Esto pese a preocupaciones sobre la atención médica para los refugiados en los hoteles, dijo.

Ante tal situación, ahora estas personas exigen a Londres que les devuelva a Afganistán, lo que arroja dudas sobre el éxito del programa de reasentamiento afgano del Gobierno británico.

Al abordar la situación de estos hoteles, el medio citó a un médico, que ha estado trabajando durante semanas con los afganos recién llegados al Reino Unido, quien, bajo la condición de anonimato, informó que “algunos pacientes me dijeron que querían irse a casa. Un hombre, que tenía 67 años, seguía diciendo: no puedo soportar esto más. Tengo que salir de esta habitación (de hotel)”.

En este sentido, el concejal Danny Thorpe del Royal Borough de Greenwich, en el sureste de Londres, la capital británica, tachó de “imperdonable” la falta de apoyo gubernamental organizado cuando afganos llegaron en agosto.

“Este fue uno de los fracasos más impactantes del Gobierno que he encontrado”, hizo hincapié, citado por The Guardian.

En Sheffield, donde un refugiado afgano de cinco años perdió la vida en agosto tras caer de la ventana de un hotel poco después de llegar al Reino Unido, el consejo local expresó su preocupación por la idoneidad de los hoteles para albergar a refugiados afganos.

(HispantV)