El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, contó que se esconde de su esposa para «llorar en el baño» cuando se siente muy presionado por la toma de algunas decisiones que tiene que afrontar como mandatario, ya que afirmó una decisión «mal tomada» puede hacer «sufrir a mucha gente».

Así lo reveló durante un encuentro de pastores evangelistas llamado Comunidade das Nações en el que parafraseó el pasaje de la Biblia que refiere «más o menos así: No temáis a nada, salvo a la muerte eterna», para señalar a «algunos (políticos) que se creen inmortales. Tienen el placer de ver al otro de rodillas, clamando por Justicia, por Libertad, por trabajo y por la Vida», enfatizó.

Bolsonaro abordó desde una perspectiva religiosa, materias políticas referidas al aumento de tarifas en los servicios -principalmente en el combustible- y defendió a su gabinete de procedencia evangelista.

Luego, recitó otra cita bíblica que señala que «por falta de conciencia el pueblo perece». Fue entonces cuando Bolsonaro soltó su confesión: «Cada vez más, no sabemos qué debemos hacer, hacia dónde debemos dirigir nuestras fuerzas. ¡Cuántas veces lloro en el baño de casa! Mi esposa nunca me vio. Ella piensa que soy un tipo duro».

Tras ser aplaudido por su declaración, el mandatario se excusó en que se encuentra más presionado que cuando era diputado. «Una decisión mía mal tomada hace sufrir a mucha gente: movimientos en la bolsa, en el dólar, en el precio del combustible. El precio del combustible… ¡Yo no mando en Petrobras!», dijo.

El presidente de ultraderecha buscó durante todo su gobierno y sus años como figura pública mostrar una imagen de «hombre fuerte». Entre sus frases más polémicas, una vez aseguró: «El hijo empieza a mostrarse amanerado, gay, cambia su comportamiento, ¿verdad ?, ya oí de algunos aquí…, menos mal que me dieron unos chirlos de chico, mi padre me enseñó a ser hombre».

Privatizar Petrobras

En el evento se pronunció en apoyo a figuras de su gabinete, como lo es Milton Ribeiro -«La gran diferencia es que hoy tenemos a un pastor en el Ministerio de Educación», dijo en referencia a Fernando Haddad, candidato a presidente en las elecciones de 2018, y exministro de educación de Lula Da Silva-; como también sobre André Mendonça, exministro de Justicia que candidateó como Juez del Supremo Tribunal Federal: «Siempre defendí tener un juez terriblemente evangelista».

Durante el mismo día, el presidente de Brasil dijo «ya tener ganas de privatizar Petrobras», adelantando que abordará la materia con su equipo económico en una entrevista con la radio evangélica Novas da Paz. Su argumento está apoyado en la contención del aumento de las tarifas.

A fines de septiembre el ministro de Economía, Paulo Guedes, había anticipado que Petrobras y el Banco de Brasil están en la “fila” de privatizaciones para los próximos años. Durante su campaña a las presidenciales de 2018, Bolsonaro dijo que «no le gustaría» ver privatizada a Petrobras y que solo tomaría la medida «si no hay solución».

(750.am)