El presidente de Rusia describe los ejercicios de la OTAN y el uso de aviación estratégica por su parte en el mar Negro, como un “serio desafío” para Moscú.

“Ahora Estados Unidos y sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) están llevando a cabo ejercicios no planificados en el mar Negro […] se utiliza la aviación, incluida la aviación estratégica”, ha denunciado este sábado Vladimir Putin, en declaraciones ofrecidas en un programa en la cadena Rossiya 24.

El mandatario ruso ha hecho énfasis en que estos juegos de fuego representan un “serio desafío” para Rusia, ya que los aviones que participan en el simulacro están equipados con armas de combate.

Ha indicado que el Ministerio de Defensa del país ha propuesto que las fuerzas rusas también lleven a cabo ejercicios en la zona del mar Negro, pero, ha dicho, esta medida no es necesaria, pues “no hay necesidad de una mayor escalada de tensión allí”, ha subrayado.

Se observa un pico de tensión en la zona por la presencia de dos buques de guerra pertenecientes a la Sexta Flota de Estados Unidos: el USS Porter y el USS Mount Whitney, en el marco de su supuesta colaboración con el bloque militar occidental.

Estos desplazamientos han llevado a Rusia a advertir que cualquier violación de su territorio provocará una escalada de la situación y, por ende, dará una respuesta contundente.

El viceministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Serguéi Riabkov, aseveró el pasado jueves 11 de noviembre que Putin vigila de cerca la presencia de los buques de guerra de Estados Unidos que habían entrado en el mar Negro para participar en simulacros multinacionales que el Comando Europeo de Estados Unidos estaba llevando a cabo.

Riabkov denunció que EEUU y sus aliados de la OTAN desestiman cuestiones obvias que aumentan el riesgo de enfrentamientos, mientras ha reconocido que su país está alarmado ante estas medidas provocativas.

Rusia no tiene nada que ver con la crisis migratoria en frontera bielorruso-polaca

En otro momento de sus declaraciones, Putin ha abordado también la crisis migratoria en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, y ha negado categóricamente cualquier implicación de Moscú en la situación surgida.

“Rusia no tiene absolutamente nada que ver con esta situación, no participamos en ningún proceso”, ha dejado claro.

Miles de personas se agolpan en la frontera polaca, resultado de lo que tanto el Gobierno polaco como la Unión Europea (UE) y la OTAN han descrito como una acción orquestada por parte del Gobierno de Bielorrusia, presidido por Alexander Lukashenko, que a finales del mayo pasado alertó que no impediría la llegada de migrantes al bloque comunitario como represalia por las sanciones en su contra.

Ante tal coyuntura, Bielorrusia condena el aventurismo de Polonia, que ha desplegado fuerzas cerca de sus fronteras, y le advierte de una dura respuesta con su dupla, Rusia, con que mantiene estrechos vínculos militares y económicos.

(HispanTV)