Nunca se está preparado para decir adiós y ahora, la Fórmula 1 debe aprender a despedirse de una figura «inspiradora» que ayudó a embellecer la historia Mundial. Frank Williams, creador y exdirector de Williams Racing, ha fallecido a los 79 años rodeado de su familia como ha confirmado la propia escudería. El británico, que ingresó en el hospital el pasado viernes, no pudo hacer frente a unos problemas de salud que dejan la pérdida de una leyenda que comenzó a escribirse en 1977 cuando fundó, junto a Patrick Head, el segundo equipo más laureado de toda la historia del Gran Circo.
Del sacrificio personal, familiar y económico por un sueño que se cumplió, Sir Frank hizo de Williams una escudería icónica junto a la que conquistó nueve Campeonatos de Constructores y siete de pilotos (con Alan Jones, Keke Rosberg, Nelson Piquet, Nigel Mansell, Alain Prost, Damon Hill y Jaqcues Villenueve). Fue toda una vida de éxitos ligada a la competición, que vivió su momento más complicado en septiembre del pasado año. Tanto el británico como su hija Claire, dirigente del equipo por aquel entonces, abandonaban la escudería después de la venta a un fondo norteamericano que llegó como consecuencia de unas cuentas debilitadas por la pandemia.
Cambiaron los patrones, pero no el nombre del equipo ni los sentimientos hacia la persona que construyó todo un legado que sigue recorriendo el mundo bajo el nombre de Williams, como demuestra el adiós de los de Grove en su comunicado: «Con gran tristeza, en nombre de la familia Williams, el equipo confirma la muerte de Sir Frank. Después de ser admitido el viernes en el hospital, ha fallecido esta mañana rodeado de su familia. Hoy rendiremos homenaje a una figura tan querida como inspiradora. Le echaremos mucho de menos».
«Un verdadero gigante»
También se unió a este pésame el CEO de la F1, Stefano Domenicali, queriendo destacar toda la labor de un Sir Frank que hizo debutar sus coches el 8 de mayo de 1977 en el GP de España celebrado en el Jarama, para acumular en sus vitrinas 44 años después 114 victorias y 128 poles que se unen a su palmarés de campeones: «Fue un verdadero gigante de nuestro deporte, que superó los desafíos más difíciles de la vida y luchó para ganar dentro y fuera de la pista. Hemos perdido a un miembro muy querido y respetado por la familia de la F1 y lo extrañaremos muchísimo. Sus increíbles logros y personalidad quedarán grabados en nuestro deporte para siempre. Mis pensamientos están con toda la familia Williams en este triste momento».
Los Williams marcaron una época siendo los grandes dominadores de los años 90. Pese a que en los últimos años los resultados deportivos fueron a la baja, la historia que acumulaba la escudería a sus espaldas era la excusa perfecta para seguir buscando la competitividad que les permitiese rememorar todas esas temporadas de éxitos, a los que no renuncian ni siquiera 10 temporadas después de la última vez que vieron en primera posición la bandera a cuadros (en el GP de España 2012 con Pastor Maldonado). Aunque ahora, la prioridad es rendir homenaje a una figura a la que tienen muy claro cómo conmemorar: «Pedimos que se realicen donaciones en lugar de obsequios a la Asociación de Lesiones Espinales».
Sir Frank sufrió una lesión en la médula espinal tras un accidente de coche en 1986, que le dejó en silla de ruedas. Pero eso no le impidió gestionar el equipo con firmeza hasta que delegó todo su poder en su hija. Ambos vivieron de la mano su salida del Mundial tras la venta de Williams y el actual dirigente de la escudería, Jost Capito, tampoco quiso dejar pasar la ocasión para mostrarles todo su apoyo: «El equipo está realmente triste por el fallecimiento de nuestro fundador. Fue una leyenda e icono de nuestro deporte. Su fallecimiento marca el final de una era para nuestro equipo y la F1. Fue único en su clase y un verdadero pionero. Sus valores incluyen la integridad, el trabajo en equipo y una feroz independencia y determinación. Siguen siendo el espíritu de nuestro equipo y son su legado, al igual que el apellido Williams, bajo el cual el cual competimos con orgullo». Y ha sido junto a esa herencia, cuando ha llegado «el momento de irse». Como dijo Claire cuando vivieron su primer adiós. Descanse en paz.
(As.com)