Al menos 28 grupos al margen de la ley de Colombia firmaron y enviaron una carta al presidente electo, Gustavo Petro, en el que afirman estar dispuestos a negociar y dejar las armas.

«Estamos dispuestos a dialogar y reconciliarnos, con el objetivo de parar la violencia cíclica que algunos de nosotros controlamos. Estamos dispuestos a coordinar un cese al fuego contra la institucionalidad, a desarmarnos en el momento indicado. Estamos dispuestos a pedir perdón, a aportar verdad total e integral. Estamos dispuestos a reparar y sobre todo a no repetir los actos criminales», informaron.

El texto fue firmado por organizaciones criminales que operan en todo el territorio así como exintegrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia, que señalan estar dispuestos a apostarle a la paz del país.

«Pedimos garantías iguales a las que han obtenido los miembros de otros grupos armados al margen de la ley, fuerza pública, agentes del estado y terceros civiles que también han participado activamente en el conflicto nacional, para reemprender un nuevo camino de la mano de la sociedad y del pueblo colombiano», se lee en la carta.

En el documento, los grupos criminales aseguran que el motivo para llamar al diálogo y la disposición de dejar la guerra es el momento histórico que vive Colombia y la llegada de un presidente de izquierda y su propuesta de garantizar la paz.

«Hemos aprendido la lección que hoy en día por las armas no se llega al poder, que éste se debe llegar de manera democrática, así como lo hizo el señor Presidente Gustavo Petro Urrego. Le decimos al país que estamos dispuestos a emprender este mismo camino», argumentan los firmantes.

Entre los firmantes de la carta también está el Bloque Virgilio Peralta Arena (Caparrapos), Grupo Los Rastrojos, Grupos los Shottas de Buenaventura, Grupo la Inmaculada de Tuluá y Grupos Mexicanos de Quibdó.

(Sputnik)