Las Zonas Económicas Especiales (ZEE) no necesariamente suponen una entrega de la soberanía de Venezuela al capital extranjero, sino una oportunidad con la que el país pretende incrementar sus ingresos no petroleros y apuntalar el desarrollo de un modelo económico mixto, que incluye la sustitución de algunas importaciones, según se desprende de un informe elaborado por la periodista Madelein García, corresponsal de la multiestatal teleSUR en Caracas.

Para su reporte, García visitó La Guaira, estado vecino de la capital, Caracas, y en donde se aprobó la creación de una ZEE, que se extenderá por 69.000 kilómetros cuadrados, en el área comprendida entre el Aeropuerto Internacional «Simón Bolívar» de Maiquetía –el más importante de la nación– y el Puerto de La Guaira, puerta de entrada hacia el mar Caribe.

El gobernador de la entidad, José Alejandro Terán aseguró que la «Ley de Zonas Económicas Especiales es un catalizador para acelerar el proceso de renacimiento económico del país», que está apostando a la diversificación de su economía para reducir su dependencia de las exportaciones de crudo.

 

Empero, Terán matizó que «la renta va a seguir existiendo» y que esa dependencia no podrá erradicarse en el corto plazo, pero sí disminuirse.

«Hoy en día nosotros queremos exportar derivados, procesados; nosotros queremos exportar otros productos que elaboremos en el país, queremos profundizar el desarrollo tecnológico en Venezuela, para poder ofrecerle a los mercados internacionales la transformación de nuestra materia prima en productos ya elaborados y creo que la Ley de Zonas Económicas Especiales va en esa dirección», aseveró.

El gobernante regional defendió que La Guaira dispone de una ubicación privilegiada, que puede resultar atractiva para inversionistas extranjeros que, no obstante, tendrán que adecuarse a las necesidades y demandas locales.

«Nosotros pudiésemos decirle a los inversionistas que estén interesados: ‘nos interesa que se invierta en plantas procesadoras de alimentos. Para eso te doy esos galpones, te doy esos terrenos, te exonero aranceles si tienes que exportar maquinaria hacia la ZEE, te genero una política de incentivo fiscal, como por ejemplo un porcentaje de exoneración del Impuesto Sobre la Renta o del IVA –Impuesto al Valor Agregado– por tanto tiempo. Eso sí, exijo que la mano de obra sea mano de obra calificada de Venezuela», ilustró.

Empero, García reconoce que aunque el instrumento jurídico ya fue aprobado por el Parlamento y sancionado por el Ejecutivo, «el debate sigue abierto en todos los sectores» y uno de esos puntos es el riesgo de que este modelo de inversiones suponga la entrega de la soberanía del país al capital foráneo.

Para disipar esa duda, entrevistó al presidente de la comisión de Economía y Finanzas de la Asamblea Nacional, Jesús Farías, quien aseguró que el Estado venezolano regulará efectivamente todas las actividades de las ZEE y se encargará de administrar los recursos que de ellas se generen.

«Eso significa que el rendimiento económico que se va a registrar allí, en términos de exportación, de industrialización, de cadenas productivas con el exterior y hacia lo interno del país, con la sustitución de importaciones, también se va a traducir en altos rendimientos sociales. ¿Qué significa eso? Ingresos para los salarios, ingresos para la inversión pública productiva y social», detalló.

Para la corresponsal, otro punto a destacar es que la «Ley de las Zonas Económicas Especiales fue aprobada con el consenso de todos los sectores del país, políticos opositores y del gobierno, comunidades, empresarios», aunque aún no cesan las discusiones relativas a su implementación práctica.

Jaime González, diputado a la Asamblea Nacional por el opositor partido socialcristiano Copei, calificó el instrumento como «la ruta de la prosperidad para Venezuela» y destacó que «ha sido producto de la participación de todos los sectores de la vida económica, de la vida social y de la vida política», incluyendo «sectores de las comunidades de base».

García concluyó su trabajo periodístico señalando que aún cuando las ZEE no han empezado a marchar, «Venezuela ha incrementado su exportación en el primer semestre del año, duplicando al mismo período de 2021», aún en medio de sanciones, bloqueos y pandemia, lo que interpreta como un proceso de reinvención del país «para hacer valer su derecho al comercio internacional».

(LaIguana.TV)