Para el recién instalado gobierno del Pacto Histórico, el abandono progresivo de la economía basada en hidrocarburos y el reforzamiento de la actividad agrícola son objetivos estratégicos.

Así las cosas, el presidente Gustavo Petro aseguró este viernes que una de las metas de la agenda común con Venezuela es «lograr que el precio de los fertilizantes para producir en el campo en Colombia pueda reducirse sustancialmente de cara a bajar el precio de los alimentos», en lo que Monómeros resulta una pieza capital.

Petro formuló estas declaraciones en el marco de otros cometarios relacionados con la rehabilitación de la relación bilateral con Venezuela, tras el anuncio de la designación de embajadores por parte de los dos países comunicada en la jornada previa.

La productora de fertilizantes, filial de la estatal venezolana Pequiven –cuya casa matriz es Petróleos de Venezuela–, tiene sede en Barranquilla, capital del departamento del Atlántico y está bajo el control de agentes del exdiputado Juan Guaidó desde 2019.

En septiembre de 2021, la Superintendencia de Sociedades de Colombia (Supersociedades) decretó una medida de intervención por causa de un aparente riesgo de quiebra, que solo se levantó el pasado 5 de agosto, dos días antes de que acabara el período presidencial de Duque.

La compañía, que hasta que fue cedida por Bogotá al pretendido «gobierno interino» era considerada el segundo principal activo venezolano en el extranjero, ha sido objeto de prácticas dolosas y lesivas para el patrimonio de Venezuela, como se constata en numerosos trabajos periodísticos realizados por La Tabla e incluso, por la propia prensa colombiana.

El recién estrenado presidente de Colombia externó jornadas atrás que la situación de la compañía era «complicada», no solo por su escasa salud financiera –dijo que estaba «casi en quiebra»–, sino que sobre ella pesa un régimen de sanciones impuestas por el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, lo que ha comprometido su operatividad.

Petro se ha abstenido de precisar cuál será el curso a seguir de su administración sobre este asunto, muy posiblemente porque el levantamiento de la medida por parte de Supersociedades no implica automáticamente que su gestión pueda regresarle el control a Caracas.

(LaIguana.TV)