El consumo de gas natural en Europa cayó un 13% en 2022, el más fuerte descenso de la demanda en la región, mostró un informe de la Agencia Internacional de la Energía (AIE). La situación tiene de fondo un deterioro de la crisis energética en la que viven los europeos tras las restricciones a la adquisición de los recursos energéticos rusos.
«Se calcula que el consumo de gas natural en los países de la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos] en Europa se redujo un 13% [más de 70.000 millones de metros cúbicos] en 2022, el mayor descenso en términos absolutos de la historia. Los precios récord del gas han provocado una reducción sin precedentes de la demanda industrial de gas, mientras que el clima más cálido ha ejercido presión sobre la demanda relacionada con las redes de distribución de gas», señala el informe.
La demanda industrial se redujo en 30.000 millones de metros cúbicos, la de distribución de gas en 34.000 millones y la de generación de electricidad en otros 6.000 millones. En el cuarto trimestre de 2022 se registró una caída de más del 40% en la demanda anual, con un descenso del consumo del 20% (33.000 millones de metros cúbicos) respecto al mismo periodo del año anterior, indica el informe de la AIE.
Según las previsiones de la AIE, la demanda de gas en Europa caerá otro 3% en 2023. Esto se deberá al mayor uso de renovables y a la mayor disponibilidad de energía nuclear en Francia. La demanda de gas en el sector industrial se recuperará casi un 10%.
Sin embargo, si el suministro de gas desde Rusia cesa por completo y se intensifica la competencia del gas natural licuado (GNL) en el mercado mundial, la demanda podría caer hasta un 8%, indica el informe. Durante los últimos meses, los países europeos viven una crisis energética por los altos precios del gas y la electricidad, estos se dispararon debido a las sanciones impuestas contra Rusia.
(Sputnik)
