El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este miércoles que solo ocho de 100 funcionarios de distintos niveles dejarán sus cargos para postularse en las elecciones generales del próximo año. 

«Ya estamos preparados. Los que se van son gente de primera; y los que se quedan, también», dijo en conferencia de prensa, en medio de los cambios que tendrá su equipo de trabajo y que ya comenzaron con las postulaciones presidenciales. 

La víspera, López Obrador se reunió con su gabinete ampliado para preguntarles a los funcionarios quiénes participarán en los comicios, ya que de esta forma puede pensar en quiénes los sustituirán. 

El primer cambio concretado es el del canciller Marcelo Ebrard, quien ya es precandidato presidencial. Su lugar será ocupado por Alicia Bárcena, exsecretaria ejecutiva de la Comisión para América Latina y el Caribe (Cepal). 

Ahora está pendiente el nombramiento en la secretaría de Gobernación, ya que su titular, Adán Augusto López, también se postulará a la presidencia y, de acuerdo con las normas establecidas por el partido oficialista, deberá hacer efectiva su renuncia a más tardar el viernes. 

El presidente explicó que, más allá de Ebrard y López, hay otros «compañeros y compañeras» que buscarán cargos que pueden ir desde gubernaturas hasta senadurías o diputaciones. 

«Hay procedimientos donde todos tienen las mismas condiciones, no se vaya a interpretar que estoy ayudando, van en igualdad de circunstancias», dijo al reconocer que la inmensa mayoría de los funcionarios optó por quedarse hasta el final del Gobierno. 

Retiro 

López Obrador se negó a detallar los nombres de los ocho funcionarios que renunciarán, pero sí anticipó que se irán en distintas fechas que ya están pactadas. 

Con respecto a su futuro, el mandatario reiteró que, una vez que termine su gestión en septiembre de 2024, se retirará de la política. 

«El que sale se queda con la nostalgia de seguir mandando y se olvidan de que uno tiene su oportunidad, su tiempo, y por eso hay problemas», dijo al descartar la posibilidad de que pueda seguir participando en la vida política del país. 

En ese sentido, recordó que los presidentes emanados del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que gobernó 70 años de manera consecutiva, tenían la disciplina de que, en cuanto terminaban su Gobierno, no volvían a hacer declaraciones públicas.  

También señaló que, con el Partido Acción Nacional (PAN), en cambio, pasó lo contrario, ya que los expresidentes Vicente Fox y Felipe Calderón siguen teniendo una fuerte presencia mediática. 

«Yo no voy a hablar nada. Voy a jubilarme por completo. Sí van a hablar mucho de mí, pero me voy a ir muy tranquilo con mi conciencia. Acerca de que me puedan perseguir, pues no me voy a ir del país, todo mundo va a saber dónde voy a estar, ahí los voy a esperar, estoy acostumbrado a enfrentar la persecución política», señaló. 

(RT)