El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, acudió a las urnas junto a su esposa, Begoña Gómez, con el inicio de la jornada electoral. Sin embargo, la escena no fue tan pacífica como esperaban.

Ataviado con una camisa verde y acompañado de su esposa vestida de rojo, Sánchez enfrentó una recepción hostil. Los abucheos y gritos de «mentiroso», «Que te vote Txapote» y «dimisión» retumbaron en el ambiente, lo que llevó a aumentar el cordón de seguridad alrededor del líder socialista.

Dentro del centro educativo, los improperios no cesaron, y la presencia de seguidores del PSOE intentó calmar la situación, pero el malestar era palpable. La prensa no tardó en captar el momento, dejando testimonio de la tensa recepción que tuvo Pedro Sánchez en su lugar de votación.

A pesar de las medidas de seguridad, los ciudadanos se acercaron a manifestar su indignación con la gestión del presidente. Los abucheos y gritos continuaron, llevando la tensión a su punto más álgido. Algunos simpatizantes intentaron acallar los insultos, pero la molestia de los votantes fue evidente. La jornada electoral para Pedro Sánchez estuvo marcada por la controversia y las críticas en su paso por el colegio electoral.

(larazon.es)