De acuerdo al diario ‘Clarín’, el presidente Argentina no tendría un embajador en Managua, y se unirá al grupo de países en las Naciones Unidas que suscribe la resolución sobre los derechos humanos en Nicaragua. 

Según el rotativo, Javier Milei todavía está decidiendo «cómo obrar» con respecto a Cuba y Venezuela, dos países a los que como candidato criticó en numerosas oportunidades y durante sus participaciones televisivas previas a saltar a la arena política. 

Milei, que se define como «anarcocapitalista» y «libertario», sostuvo en su ruta rumbo a la Casa Rosada —sede del ejecutivo argentino— que sus aliados internacionales serían Estados Unidos e Israel, países que visitó como señal de su fuerte alineamiento con ese bloque político internacional, tras imponerse en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales, que le ganó al peronismo el 19 de noviembre. 

Previamente, el hoy mandatario sudamericano sostuvo que, de hacerse del ejecutivo argentino, cortaría lazos económicos con Brasil y China por ser «países comunistas», aunque luego matizó esas opiniones. 

La semana pasada, el jefe del Estado argentino mantuvo un encuentro con el representante especial del presidente chino Xi Jinping, Wu Weihua, el embajador del gigante asiático en Argentina, Wang Hei, y el representante especial del Gobierno chino para Asuntos de Latinoamérica, Qiu Xiaoqi. 

En tanto, la canciller argentina, Diana Mondino, declaró que «la relación con ambos países —aludiendo a China y Brasil— será excelente, como debe ser». 

Milei decidió además que el peronista Daniel Scioli, quien fuese el candidato presidencial por el kirchnerismo en las elecciones del 2015, se mantuviese en su cargo como embajador en Brasil, en lo que fue interpretado como un gesto de acercamiento al presidente del país lusófono, Luiz Inacio Lula da Silva, dada la buena relación entre Scioli y el mandatario brasileño. 

(Sputnik)