Los familiares de José Tovar Colina, alias “El Picure”, no han recibido el cuerpo del delincuente, abatido —el martes— en Guárico y cuya autopsia se realizó en la morgue de Bello Monte, en Caracas.
“No vamos a velarlo”, dijeron, ayer, a periodistas de la capital, 3 primas y una tía de “El Picure”, quienes acudieron a Caracas a hacer los trámites administrativos para sepultarlo. Irma Colina, la tía, dijo que no lo veía “hace dos años”.
El proceso de entrega del cadáver podría extenderse, porque —se conoció— “se requiere que varias víctimas de extorsión lo identifiquen”.
No obstante, la periodista Angélica Lugo informó, a través de su cuenta en Twitter, que familiares de Tovar informaron que les pidieron “dos condiciones para entregar el cuerpo: que venga su madre y que sea cremado”.
Pero, los familiares informaron que la madre de Tovar Colina no puede asistir a Caracas. “Sufrió un evento cerebro vascular (ECV) cuando se enteró del operativo especial que se desplegaba en El Sombrero”, informaron.
La vida y actividades de Tovar Colina “no estaban claras para su familia”. Aunque reconocen que era un delincuente, dijeron que, al parecer, tiene cuatro hijos, pero no están seguros de dónde residen. “Él no se comunicaba con nosotros”, dijo la tía.
“Queremos llevarlo a El Sombrero y darle sepultura”, dijo Irma Colina, quien representa a la familia, informó el diario capitalino Últimas Noticias.
Sería el segundo trámite funerario que realiza la familia en una semana. El domingo pasado, fue abatido Júnior Tovar Colina, el único hermano de ‘El picure’. Su ‘caza’ fue el inicio de la Operación Madriguera, que buscaba capturar al peligroso delincuente, el más buscado del país.
“En el sepelio de Júnior solo participaron 20 mujeres”, contaron los familiares. “Militarizaron el cementerio y no permitieron la entrada de hombres”, agregaron.
La militarización de la morgue de Bello Monte continuaba ayer. Los accesos habían sido restringidos, hasta para los familiares de otros cuerpos que se encuentran en la medicatura forense.
En El Sombrero continuaba, ayer, la presencia policial y militar, aunque se realizó el sepelio de dos víctimas “colaterales” del operativo donde cayó abatido ‘El Picure’.
Rafael Fernández y su primo Stalin —de igual apellido— fueron despedidos ayer en la mañana en El Sombrero. Los féretros fueron llevados al estadio Miguel Ángel Muñoz, donde se les rindió homenaje.
Rafael llevaba 30 años como entrenador de la liga de beisbol Criollitos de Venezuela, con sede en esa población guariqueña.
El dirigente deportivo Marcial Rodríguez pidió que se investigue cómo murieron los dos parientes Fernández, relacionados con la actividad deportiva en la región.
Pese al tiempo en el que Tovar Colina ejerció un reinado de terror en el Guárico, su familia pide —ahora que ha muerto— paz.
(Panorama)
