Este jueves se inició en Brasil la campaña para las elecciones del próximo 7 de octubre. Se considera no solo la más corta de los últimos años -con 52 días hasta la primera vuelta y 35 para propaganda de televisión y radio-, sino también la más indefinida debido a la incertidumbre sobre la candidatura del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, que se mantiene preso desde el pasado 7 de abril por acusaciones de presunta corrupción.
Aunque el Partido de los Trabajadores (PT) ha inscrito a 13 candidatos para los comicios legislativos, regionales y presidenciales del 7 de octubre, también presentó oficialmente la candidatura de Lula, quien lidera las encuestas de intención de voto con un 30 % lo que le daría el éxito en una segunda vuelta ante cualquier contrincante.
Sin embargo, la Fiscalía solicitó la impugnación de la candidatura ante la corte electoral por considerar que Lula “no es elegible” por estar ya condenado a 12 años de prisión por corrupción pasiva y lavado de dinero.
Quien le sigue en las encuestas a Lula, con 17 % de intención de voto, es el candidato de ultraderecha Jair Bolsonaro, y luego la ecologista Marina Silva con 13 %.
(LaIguana.TV)
