Una adolescente de 16 años que vivía en Carora, estado Lara, decidió quitarse la vida sin dejar ninguna razón para justificar esta decisión. La joven era estudiante de quinto año de bachillerato.

 

Según los familiares, la noche del martes 23 de octubre se le veía alterada mientras se comunicaba con alguien por su celular. Al día siguiente le mencionó a su madre que no iría al liceo y se quedó en la casa.

 

La señora, al volver en la tarde a la casa, vio a su hija colgada de una sábana y con el celular a sus pies con los archivos de todas las redes de mensajería borrados.

 

Funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) arribaron al sitio para levantar el cuerpo y llevarlo hasta la morgue de la localidad.

 

(LaIguana.TV)