¿Invasión en puerta a Venezuela con ejercicios militares de EEUU y Colombia? Pérez Pirela analiza

Colombia, país vecino que transita por una compleja situación interna y que hoy anuncia ejercicios militares conjuntos con Estados Unidos, fue el tema elegido por Miguel Ángel Pérez Pirela para la edición 168 de Desde Donde Sea. 

 

Entre los problemas que aquejan a la nación, destaca que es uno de los epicentros del COVID-19 en América Latina, pero haciendo caso omiso a las recomendaciones de las autoridades sanitarias, anunció la apertura de vuelos internacionales y flexibilizó la cuarentena «a niveles irresponsables» para abrir la economía, dejando en manos de los ciudadanos el confinarse o no. 

 

El difícil panorama político y social se expresa a partir del escándalo de falsificación de testigos que puso al expresidente Álvaro Uribe Vélez en prisión domiciliaria, el juicio que enfrenta Iván Duque por fraude electoral, las crecientes masacres y las protestas ciudadanas en contra de la brutalidad policial. 

 

En ese contexto, las autoridades anunciaron la realización de ejercicios militares conjuntos con Estados Unidos en fecha próxima, bajo el manido argumento de la lucha contra el narcotráfico.

 

El experto señaló que lo anterior obligaría a cualquier medio de comunicación a hacer aunque fuere una alusión al tema, pero en su lugar, las corporaciones de la comunicación optan por callar esa dura realidad y en su lugar, hablan de Venezuela. 

 

 

Pérez Pirela expresó su preocupación en torno al anuncio del gobierno de Iván Duque, referido a la realización de ejercicios militares combinados entre Colombia y Estados Unidos, los días 18 y 19 de septiembre del año en curso en la región de Coveñas, departamento de Sucre. 

 

La operación, que recibe el nombre de Poseidón, pretendería afinar estrategias para la detección y neutralización de grupos irregulares asociados al narcotráfico. En ella, según la agencia EFE, participarán aeronaves y embarcaciones estadounidenses y aviones de la  Fuerza Aérea Colombiana y se regirán por los parámetros internacionales definidos por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

 

Este anuncio se sucede a la reactivación de la «colaboración» militar entre Washington y Bogotá para la lucha contra el narcotráfico, anunciada el pasado 27 de agosto, tras el desconocimiento del gobierno de Duque de la decisión del Tribunal Administrativo de Cundinamarca, que otorgó razón a la parte demandante –senadores de la oposición– e indicó que la decisión era inconstitucional puesto que no se había solicitado la autorización al Senado para la operación de tropas extranjeras en el territorio, tal y como prevé la Carta Magna de ese país. 

 

A este panorama se suma la mini gira del secretario de Estado, Mike Pompeo, por Colombia, Guyana, Brasil y Suriname entre el 17 y el 30 de septiembre.

 

Trump, a contrapelo de lo que indican todos los informes de las agencias antidrogas en el mundo, acusó hoy a Venezuela de ser uno de los países líderes en tránsito y producción de drogas ilegales, pero también calificó como «inaceptables» los niveles de cultivos ilícitos en Colombia e instó al gobierno de Duque a retomar las fumigaciones con gliofosfato para reducir los cultivos a la mitad.

 

Datos consultados por el experto para el programa compilados por la Oficina de Asuntos de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, indican que Colombia lidera la producción de cocaína  y el cultivo de coca en el mundo. En 2019, se sembraron en ese país 154.000 hectáreas de coca. 

 

 

El analista comentó que el embajador de Venezuela ante las Naciones Unidas, Samuel Moncada, reiteró su denuncia sobre las implicaciones de los ejercicios militares anunciados, así como de la inminente agresión militar contra Venezuela que se ejecutaría desde Colombia.

 

En su cuenta de Twitter, Moncada advirtió: «Colombia es el primer exportador de cocaína y EEUU el primer consumidor en el mundo. La razón: carteles narcotraficantes penetraron las agencias de seguridad encargadas de frenar el crimen en los dos países. Ahora, unidos preparan nueva agresión militar contra Venezuela».

 

El también director de LaIguana.TV comentó que el diplomático señala directamente a la DEA y alude al agente José Irizarry, quien reconoció el 14 de septiembre haber conspirado para lavar dinero de un cartel colombiano.

 

Esto da cuenta que las agencias de inteligencia en los Estados Unidos, ya hacen parte de las estructuras del narcotráfico en Colombia, lo que, a su vez, explicaría el por qué un agente de la DEA participó en la fallida incursión mercenaria del pasado 03 de mayo. 

 

Moncada también recuerda que en enero de 2020, Colombia y Brasil realizaron ejercicios militares conjuntos en suelo colombiano. El propósito sería acoplarse para ejecutar una agresión militar contra Venezuela. 

 

«En agosto 2020, Duque recibe a enviados de seguridad nacional de Trump y anuncian máxima presión  contra Venezuela. Primer resultado: Duque mintiendo sobre misiles iraníes en Venezuela y anunciando regreso de tropas de EEUU. Buscan excusa para el conflicto», escribió el representante venezolano el 5 de septiembre.

 

«El desespero por cumplir con el plan de Trump lleva a Duque a violar la Constitución. Así permite el regreso de tropas de EEUU sin la necesaria autorización del Congreso. En agosto se decidió que la máxima presión contra Venezuela arrancaba en septiembre», continuó denunciando entonces.

 

Moncada también detalló el rol de Brasil en las operaciones: «Bolsonaro acordó con Trump unirse a la presión contra Venezuela en marzo 2020; con ese objeto cambió su doctrina militar. Brasil participó en ejercicios militares de enero y ejecutará en septiembre la ‘Operación Amazonía'».

 

A juicio de Miguel Pérez Pirela «lo irónico, (…), lo descarado» de esta situación es que mientras que Duque está violando la Constitución de su país, en procura de convertirlo en cabeza de playa para una invasión contra Venezuela, «Colombia arde» por todos los costados con protestas sociales y masacres. 

 

 

Según el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz, Indepaz, desde el inicio del año se han contabilizado 57 masacres. La última de ellas se registró en el departamento de Antioquia, cuando tres personas fueron asesinadas. 

 

El evento ocurrió una semana después de que se informara del asesinato de otras cinco personas en ese mismo departamento. 

 

Además, siguiendo siempre la información aportada por Indepaz, en las veredas próximas a los lugares donde se a abandonar sus hogares y se niegan a regresar a ellos aduciendo que carecen de garantías para su seguridad.

 

Según los testimonios recabados, responsabilizan a grupos militares de las ejecuciones. 

 

De su lado, la Organización de Naciones Unidas, a través de Rosemary DiCarlo, responsable de Asuntos Políticos del ente multilateral, exhortó a los grupos armados a poner fin a la violencia y facilitar la respuesta a la pandemia, ello en consonancia con el llamado al alto al fuego mundial que hiciera el secretario general, António Guterres. 

 

En este punto, el analista criollo precisó que si bien la prensa y el gobierno de Iván Duque suele restringir el alcance del término «grupos armados» a la disidencia de las FARC y al ELN, en esta categoría también se incluye al paramilitarismo que actúa conjuntamente con el Ejército colombiano y bajo la égida de Bogotá. 

 

«El asesinato de jóvenes y excombatientes es una amenaza para la paz. Reconocemos el papel de los líderes comunitarios y el Gobierno para tratar de rectificar este desafío. Todos reconocemos que hay que hacer más», añadió DiCarlo.

 

Pérez Pirela estima que en la inestabilidad social y política derivada de las masacres, está la génesis de las protestas contra el abuso policial. 

 

Hoy, refirió, la razón de la protesta fue la pasividad de Duque para ofrecer una respuesta efectiva ante la brutalidad policial generalizada, lo que contrasta radicalmente con la beligerancia que mostró cuando grupos de ultraderecha pretendieron derrocar a Maduro por la vía violenta y por medio de acciones terroristas. 

 

El asesinato de Javier Ordóñez (46) la semana pasada, mientras se encontraba bajo custodia policial, funcionó como detonante para avivar unas protestas que la pandemia había adormecido, comentó.

 

La impunidad es tal, que incluso la alcaldía de Bogotá denunció que la Policía disparó indiscriminadamente contra los manifestantes durante las primeras dos noches, dejando  el lamentable saldo de 11 personas asesinadas. 

 

Sin embargo, el trato diferencial de estas informaciones en las arenas políticas internacionales es también real. «Si algo parecido ocurriera en Venezuela, veríamos a los marines y a los cascos azules intentando invadir», cuestionó el comunicador.

 

A las manifestaciones se unió la Confederación Unitaria de Trabajadores, cuyos miembros rechazan la crisis económica que afecta a los ciudadanos durante la pandemia y le exigen al gobierno de Iván Duque la discusión del Pliego de Emergencia que ya consignaron. 

 

A lo antes mencionado «hay que añadir que a Duque se le ocurrió, en medio de la anarquía reinante, abrir los vuelos internacionales», mencionó el también filósofo. La ministra de Transporte, Ángela María Orozco, anunció la apertura de los aeropuertos internacionales de Bogotá, Cali, Medellín y Cartagena, a partir del venidero 21 de septiembre. 

 

El experto en comunicación política opina que la presión de los grandes consorcios contra el gobierno de Duque, incapaz de controlar la pandemia, ha hecho que se tomen medidas pensando en el dinero y no en los ciudadanos, por mucho que intenten maquillar el desacierto anunciando que se seguirán «estrictos protocolos de bioseguridad».

 

 

En el segmento final, algunos usuarios cuestionaron la actuación de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet. 

 

Una participante se preguntó retóricamente: «¿Qué estará pensando la señora Bachelet que no se pronuncia? ¡Qué señora tan sinvergüenza! y puso bajo sospecha su carácter de defensora de los Derechos Humanos.

 

Otra persona indicó que no comprendía la actitud de Bachelet, considerando que viene de Chile, un país que atravesó una cruenta dictadura militar en las que las violaciones de los derechos fundamentales estaban a la orden del día. 

 

Sobre esto, el director de LaIguana.TV refirió que hoy la oficina de Bachelet publicó un informe en el que se ataca a Venezuela, mientras que de Colombia, acaso se pronuncia de manera esporádica y siempre ambigua. 

 

Bachelet, quien además cuenta con un historial de represión contra el pueblo mapuche mientras ejerció la primera magistratura en Chile, se suma al silencio mediático sobre el duro panorama de Colombia.

 

 

El libro recomendado de hoy fue «Nietzsche», escrito por el influyente filósofo alemán Martin Heidegger.