Este sábado 10 de octubre el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, designó al abogado estadounidense Jared Genser como asesor especial sobre la Responsabilidad de Proteger (R2P). Su trabajo consistirá en “analizar, estudiar y debatir cómo desarrollar mecanismos para que dicha organización prevenga y responda ante los crímenes contra los derechos humanos en la región”.

De acuerdo al portal La Tabla, este ciudadano, el primero de junio de 2017, escribió para el New York Times un artículo en el que aseguraba que Venezuela necesita de una intervención internacional.

Genser, además, tendría entre sus clientes al dirigente ultraderechista Leopoldo López. Según el referido portal, también habría respaldado el golpe del 30 de abril de 2019.

El abogado, aparte de ser asociado de la National Endowment for Democracy (NED), habría actuado como aliado de la activista opositora Lilian Tintori, desde que esta realizara su gira internacional en el año 2014 para solicitar apoyo en la liberación de su esposo.

El nuevo asesor de la OEA, igualmente, habría escrito el libro “El caso de Leopoldo López Mendoza” junto a José Antonio Maes.

Amazon Studios está produciendo (en asociación con Amazing Owl Productions y TrueNorth Media) una serie -sin título aún- inspirada en Genser y su firma, que lo presenta como un ‘héroe’ que ‘libera a los presos de conciencia en las zonas calientes más difíciles del mundo’”, destaca La Tabla.

El abogado también habría escrito varios libros sobre este tipo de temas. Entre ellos resalta La Responsabilidad de Proteger: La promesa de detener las atrocidades masivas en nuestro tiempo, publicado por la Universidad de Oxford en el año 2011.

De acuerdo a La Tabla, su “socio intelectual” es el exparlamentario canadiense Irwin Cotler.

Según indica el portal, para Genser la comunidad internacional “debería estar dotada de instrumentos jurídicos y coercitivos (es decir, militares) que sean fiables para poder poner en práctica mecanismos de prevención, reacción y reconstrucción de crisis humanitarias”.

“El R2P intenta ‘prevenir’ genocidios, limpiezas étnicas y crímenes de guerra y lesa humanidad. Se basa en la premisa de que la soberanía conlleva la ‘responsabilidad de proteger a todas las poblaciones de crímenes atroces y violaciones de derechos humanos’”, señala La Tabla. Este mecanismo habría sido utilizado en Sudán, Libia, Siria y Kenia.

“EEUU y sus servidores regionales y locales promueven la ‘crisis humanitaria’ para justificar la intervención (copia del caso Libia en 2011, autorizada por el Consejo de Seguridad de la ONU) a partir de la violencia callejera del antichavismo en 2014”, concluye el medio.

(LaIguana.TV)