La capital alemana acoge una protesta masiva que busca expresar el rechazo a las restricciones impuestas por el Gobierno debido a la segunda ola de contagios de COVID-19 que atraviesa el país.

Hace unos días, el Parlamento nacional discutía los cambios propuestos para la ley de protección contra la propagación de coronavirus y los escépticos protestaron frente a la sede del Bundesrat.

Alemania experimentó un aumento sin precedentes en el número de contagios por coronavirus durante el mes de octubre. En consecuencia, el país entró en un confinamiento de un mes desde el 2 de noviembre. Esto implica que los bares y restaurantes hayan tenido que limitar su servicio, mientras que los teatros, cines y centros públicos de recreación como piscinas, gimnasios y saunas se vieron obligados a cerrar.

Además, se establecieron nuevas restricciones para limitar los contactos sociales.

Hasta el momento, Alemania registra un total de 927.990 contagios y al menos 14.061 decesos por coronavirus, según los datos de la Universidad Johns Hopkins.

(Sputnik)

Un manifestante durante las protestas en Alemania contra la política que obliga a usar mascarillas.

Otra de las manifestantes en Alemania en contra de la política de uso obligatorio de mascarillas.