Verónica Vadell, hija de Tomeu Vadell, uno de los seis exdirectivos de la refinería venezolana CITGO en Estados Unidos que fueron condenados en Venezuela a penas de prisión de 8 a 13 años por delitos de corrupción, aseguró que a pesar del dictamen judicial, siguen «negando los cargos» que le imputan.

«Seguimos negando los cargos. Estamos tristes y decepcionados porque hoy no se hizo justicia», declaró Vadell a la agencia de noticias francesa AFP Verónica Vadell, hija del exdirectivo que es representado por el abogado Jesús Loreto.

Según AFP, Vadell, será uno de los condenados que apelará la sentencia emitida por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

Sobre esto, el abogado Loreto confirmó a la AFP que procederán a apelar, porque —según él— «el fallo no tiene asidero práctico o jurídico”.

«Voy a apelar porque es lo que procede y porque es mi obligación», recalcó el abogado defensor, quien dijo desconfiar en el sistema legal venezolano al considerarlo politizado.

Los seis exdirectivos de CITGO, filial de Petróleos de Venezuela con sede en Estados Unidos y que comprende una serie de tres refinerías de crudo, fueron condenados en Venezuela a cumplir de 8 a 13 años de prisión por delitos de corrupción, informó este jueves el TSJ.

La sentencia también inhabilitó a los exejecutivos para el ejercicio de cualquier función pública en el futuro, añadió el TSJ.

Actualmente CITGO se encuentra secuestrada por el régimen de los Estados Unidos y usurpada por el clan que gira en torno a Juan Guaidó, todo bajo la complicidad de la administración estadounidense, que les ha permitido usurpar las funciones de la empresa estatal y apoderarse de miles de millones de dólares en recursos y bienes, así como boicotear la distribución de combustible a Venezuela y acabar con el financiamiento de tratamientos médicos indispensables para pacientes con distintos tipos de cáncer y enfermedades complejas o raras, que recibían apoyo de la Fundación Simón Bolívar de CITGO.

Las condenas contra estos exdirectivos que al parecer también guardan nexos con los planes sediciosos gestados por el prófugo de la justicia venezolana y protegido por el Reino de España, Leopoldo López, fueron distribuidas de la siguiente manera.

A José Pereira Ruimwyk, expresidente de Citgo, se le dictó una pena de 13 años y 7 meses de prisión por los delitos peculado doloso, concierto de funcionario con contratista y asociación para delinquir, y además se le impuso una multa de 2 millones de dólares, 40 % del valor de los bienes objeto del delito.

Los exdirectivos Tomeu Vadell, Jorge Toledo, Gustavo Cárdenas, José Luis Zambrano y Alirio Zambrano deberán cumplir sentencia de 8 años y 10 meses por concierto de funcionario con contratista y asociación para delinquir.

Pereira Ruimwyk es venezolano con residencia en Estados Unidos. El resto de los condenados tienen doble nacionalidad venezolano-estadounidense.

(LaIguana.TV)