Según un análisis económico de The Washington Post, la popularidad y récords alcanzados por esta moneda virtual no podrán destronar al dólar, al menos en un futuro próximo, pero eso no significa que no exista un peligro para la economía.

El bitcóin creado hace poco más de una década se ha convertido en una especie de alternativa globalista libertaria respecto a otras monedas que son respaldadas por gobiernos. Así, esta moneda virtual ha adquirido una alta popularidad, gracias a los empresarios e inversionistas que han apostado por ella.

Según analiza The Washington Post, el bitcóin y otras criptomonedas con su resurgimiento no podrán desplazar al dólar estadounidense como moneda de reserva global, al menos a corto plazo. No obstante, consideran que el peligro más inmediato es la explotación de la criptomoneda para el blanqueo de dinero y el fraude.

Como ejemplo, citan el robo de criptomonedas valoradas en decenas de millones de dólares realizadas por hackers de Corea del Norte, una acusación que fue comunicada por la inteligencia surcoreana el pasado 5 de febrero.

En términos de políticas públicas, el comité editorial del medio estadounidense notó que el crecimiento del bitcóin puede también afectar el compromiso de la Reserva Federal, con tasas de interés cero, cuyo propósito es contrarrestar el colapso económico por la pandemia buscando alentar a los inversores a arriesgar su dinero en actividades que generen empleo en lugar de usarlo en bonos del Gobierno. De esta manera, dadas las oportunidades limitadas para la inversión productiva, muchos han «elegido el rendimiento» a través de inversiones especulativas, incluido el bitcóin.

El precio del bitcóin bajó a 46.311 después de haber alcanzado un récord de 58.000 dólares atribuido a la inversión de 1.500 millones de dólares que hizo Tesla en la criptomoneda.

(Sputnik)