En las negociaciones hay muchas incertidumbres, pero también algunos predeterminados: 1) no van a acordarse ni presidenciales ni referéndum. 2) no se van a flexibilizar las sanciones personales ni financieras y 3) una parte relevante de la oposición va a participar en regionales
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Maduro y la oposición comienzan pidiendo el máximo de sus expectativas: Maduro flexibilización total de sanciones y la oposición elecciones presidenciales democráticas. Es obvio que ninguna de las dos cosas ocurrirá. Eso significa que cualquier negociación estará en el medio.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
La oposición se une alrededor de la necesidad de negociar con Maduro. Esto ya es un logro clave porque hace poco la oposición institucional sostenía que no iba a negociar con Maduro, desconociendo la realidad de su control territorial. El problema viene después: ¿qué negociar?
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
La unidad alrededor del acuerdo de salvación tiene el reto de decidir si se plantea una negociación integral de todo o nada o si se debe negociar acuerdos incrementales en los que se intercambien cosas específicas y se presenten victorias tempranas que no incluyen presidenciales.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
La oposición se fractura frente al dilema: todo o nada o negociaciones parciales. El climax de esa división son las regionales: negociarlas por separado o meterlas en el paquete global, sabiendo que no habrá acuerdo previo a una fecha en la que Maduro las ejecutará de todas todas
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Para la comunidad internacional esa división opositora es un dolor de cabeza, pues sin acuerdos internos en la oposición es imposible avanzar en cualquier acuerdo nacional con el adversario, convirtiéndose en una papa caliente.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
En las elecciones regionales los grupos opositores que creen necesario participar van a ir a esa elección con o sin acuerdo. Esto pone una presión complicada a las negociaciones generales, pues si no hay acuerdos parciales sobre regionales, se derrumba la negociación global.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Maduro entiende que las regionales son un factor híper sensible para la oposición. Por eso cede condiciones, tarjetas, habilitación de candidatos, miembros del CNE, observación internacional. Su apuesta es: “la oposición debe participar, pero mejor para él que lo haga desunida”.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Cada día que pasa, las fuerzas internas en la oposición a favor de participar en regionales crecen sustancialmente, incluyendo dentro de los liderazgos del G4. La situación se percibe muy distinta al evento parlamentario.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Pero el rechazo del gob interino a participar en regionales sin acuerdo integral es relevante y anuncia división de fuerzas, lo que debilitaría a los participantes en regionales (que enfrentarán alta abstención) y también a las negociaciones integrales, que serían dinamitadas.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
La unidad opositora sigue siendo fundamental. Por eso la estrategia ganadora es separar los acuerdos humanitarios (comida, medicina y combustible-diésel-gas) y las elecciones regionales del resto de condiciones democráticas, atando estas a las sanciones financieras y personales.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021
Cuando te pregunten si vale la pena negociar, puedes responder: no está claro y hay mil incertidumbres y riesgos, pero ¿ha valido la pena no negociar? Porque ahí la certidumbre de fracaso es ha sido más clara que el agua de Los Roques.
— Luis Vicente Leon (@luisvicenteleon) July 2, 2021