¿Tienes a menudo la tensión alta? Afortunadamente se puede solucionar incluso sin ayuda de medicamentos. La cardióloga rusa María Boyárinova comparte contigo ocho formas de lograrlo.

La hipertensión, como la llaman los médicos, puede ser causada por varios factores, entre los cuales la especialista menciona el sobrepeso, el mal sueño y el estrés, entre otros. Estas son algunas sugerencias que la doctora ofrece para normalizar la tensión arterial sin recurrir a fármacos.

Reducir la cantidad de calorías

La primera causa de todos los males es el sobrepeso, señaló Boyárinova, del Centro Nacional de Investigación Médica Almázov. Este problema cambia el funcionamiento del sistema endocrino y nervioso, ya que empiezan a producirse hormonas que aumentan el tono de los vasos y la presión. Además, el sobrepeso tiene efectos negativos sobre los niveles de colesterol y de azúcar en sangre, agregó.

Para adelgazar, es necesario reducir el valor calórico de los alimentos ingeridos cada día hasta las 1.200 o 1.500 calorías para las mujeres y las 1.500 o 2.000 en el caso de los hombres, aconsejó la doctora.

Mantenerse hidratado

También es importante mantenerse hidratado, destacó la cardióloga. Los líquidos te ayudan a sentirte saciado, y al mismo tiempo beber agua antes de comer activa el sistema digestivo.

Boyárinova no recomienda abusar del agua si se tiene hipertensión. Suficiente beber cuando sintamos que tenemos sed y nuestro cuerpo nos pide agua, en lugar de fijarse una cantidad concreta diaria.

No abusar de la sal

Boyárinova nos anima a que reduzcamos el consumo de sal y la limitemos a no más de cinco gramos al día, lo cual equivale a una cucharadita rasa. Puedes sustituirla por especias como la cúrcuma o el cardamomo, o incluso el ajo. A este respecto, la especialista considera importante abstenerse de consumir alimentos marinados, pescado ahumado, conservas, comida precocinada, embutidos y otras carnes procesadas.

Tener cuidado con el azúcar

Tienes que excluir de tu dieta zumos, dulces y yogures azucarados por su alto contenido en azúcar. Es recomendable que te olvides también de los alimentos con gran cantidad de carbohidratos de absorción rápida, o sea, con un alto índice glucémico. Nos referimos a los bollos, la miel, el arroz blanco, las patatas, los cereales de desayuno y las barritas energéticas.

Consumir café con moderación

Otra causa que puede hacer que te suba la tensión es el exceso de cafeína, enfatizó la doctora, Pero eso no quiere decir que tengas que excluir por completo el café de tu dieta.

«Según los últimos datos, el café se asocia a un efecto positivo de larga duración sobre el sistema cardiovascular. Por lo tanto, a quienes toman café con regularidad aconsejan que lo limiten a una o dos tazas al día«, añadió.

En lugar del café, puedes optar por infusiones, por achicoria, cacao o agua, explicó la especialista al portal Doctor Piter.

Hacer deporte

Quienes tienen la tensión alta es bueno que hagan deporte aeróbico, monten en bici, naden y anden a paso ligero. La idea es moverse durante por lo menos media hora al día. También puedes agregar a estas prácticas deportivas ejercicios de fuerza.

Dormir bien y acostarse temprano

Además, la cardióloga recuerda que es muy importante dormir bien y, por lo menos, ocho horas. Se recomienda acostarse no más tarde de las diez o de las once. Para dormir mejor hay que ventilar la habitación antes de ir a la cama, usar cortinas que no dejen entrar la luz del sol y desconectar los dispositivos electrónicos como el celular y la televisión una o dos horas antes de irte a la cama. Así tu cuerpo fabricará más melatonina, la hormona del sueño. El sistema nervioso funcionará mejor y regulará correctamente la presión arterial y el pulso.

Controlar el nivel de estrés

Boyárinova animó a controlar el nivel de estrés, ya que en caso contrario la sangre se satura con hormonas que aumentan la presión.

Y es que el estrés provoca picos de presión alta y eso, a su vez, infartos e ictus. Para controlarlo recomiendan prácticas de respiración, yoga, meditación y aromaterapia.

También ayudan los masajes y otras técnicas para relajar el cuerpo, un baño con hierbas (tilo y manzanilla, por ejemplo) al terminar la jornada laboral.

(Sputnik)