El presidente Nicolás Maduro es de la opinión de que el caos y la guerra civil que se suceden en Afganistán tras 20 años de ocupación militar y guerra por parte de Estados Unidos y sus aliados, es una prueba del fracaso de «la política guerrerista e intervencionista del imperio de los Estados Unidos en el mundo«, que debe obligar a Washington a extraer «conclusiones muy claras» sobre sus «amenazas a las otras regiones del mundo».
«¿Qué sucedió en 20 años en Afganistán? Guerra, bombardeos, destrucción, bombas. ¿Qué resolvió la intervención militar de Estados Unidos en Afganistán? ¿En qué ayudó al pueblo? Muertos, muertos y muertos», dijo en un encuentro con la prensa nacional y extranjera desde el Palacio de Miraflores.
De otro lado, recordó que las imágenes que han circulado en las últimas horas por los medios de comunicación y las redes sociales, recordaban a las «de Vietnam del año 1975 y la huida de Saigón» y destacó que, lejos de reconocer su responsabilidad en lo sucedido, la Casa Blanca arremetió con nuevas amenazas de sanciones en contra del país centroasiático.
«¿No les bastan los muertos, la guerra civil, los heridos, el terrorismo, el dolor, el caos y la desesperación de Afganistán para seguir amenazando con sanciones? En el siglo XXI se tiene que acabar el mundo de las sanciones, del intervencionismo militar, de las guerras, del hegemonismo estadounidense», fustigó el mandatario.
Además, indicó que en su criterio, o bien los servicios de inteligencia estadounidenses estaban «bien desinformados» o deliberadamente habían mentido, pues apenas «hace seis días» voceros de esa instancia habían asegurado que «para que los talibanes tomaran Kabul, iban a pasar 90 días».
De resultar cierto que mintieron deliberadamente, en su opinión, esto sería un indicio de que «alguien dentro del aparato de inteligencia de Estados Unidos está conspirando para malponer y dañar a Joe Biden».
En favor de esta tesis, el jefe de Estado arguyó que ayer –15 de agosto–, sectores de la derecha estadounidense y el expresidente Donald Trump habían exigido la renuncia de Biden, asunto que en su criterio se corresponde con «una estrategia golpista» largamente conocida en Venezuela.
«¿Qué lecciones va a sacar el mundo? ¿Quién pide más intervención militar en el mundo? ¿Quién la pide? ¿Quién la apoya? Esto es lo que querían con Venezuela: una intervención militar para traernos una guerra civil», reiteró el mandatario.
En relación con el último punto, trajo a colación el llamado a la aplicación de la doctrina del R2P (responsabilidad de proteger) que hicieran personeros de la oposición extremista –María Corina Machado, Juan Guaidó, Julio Borges–, lo que en la práctica implica «una invasión militar».
«Nosotros la denunciamos política y diplomáticamente, pero también nos preparamos con una Fuerza Armada Nacional Bolivariana que tiene las armas de la República, con más de 4.500.000 milicianas y milicianos armados en todo el territorio nacional, para decirle a cualquier imperio del mundo: ‘si te metes en Venezuela, entras pero no sales’, para hacer respetar esta tierra gloriosa de Venezuela nos preparamos», sostuvo.
A este respecto, se dirigió directamente al jefe del Comando Sur de los Estados Unidos, Craig Faller, que ha amenazado múltiples veces a su gobierno y hace viajes por América Latina urdiendo planes desestabilizadores. «Craig Faller, saca tus cuentas, sácalas bien, porque en Vietnam, en Afganistán, las sacaron muy mal», señaló.
(LaIguana.TV)
