El pasado lunes 8 de noviembre fue abatido, durante la Operación Tridente, Gilberto Malony Hernández, quien era apodado “El Malony” y era uno de los delincuentes más buscados del país.

Este sujeto dirigía una peligrosa banda criminal que opera en la región central del país, y tiene ramificaciones con el narcotráfico.

Entre los crímenes cometidos por el hoy occiso, se encuentra el asesinato en noviembre de 2015 del dirigente adeco Luis Manuel Díaz, quien era jefe de Acción Democrática en Altagracia de Orituco, estado Guárico.

Según destaca el portal La Tabla en su cuenta Twitter, el crimen ocurrió durante un acto político en el que estuvo presente Lilian Tintori, esposa del hoy prófugo de la justicia, Leopoldo López.

El hecho, acota La Tabla, pretendió ser manipulado por los factores de la derecha, que argumentaron que el asesinato fue por motivos políticos; sin embargo, las investigaciones determinaron que se trató de un ajuste de cuentas entre El Malony y Díaz, quien era apodado La Crema.

Luis Manuel Díaz, jefe local de AD, le disputaba al hampón el cobro de ‘vacunas’ en centros de trabajo de obras públicas en la entidad. Tenía 44 años, lo apodaban ‘La Crema’ y fue asesinado el 25 de noviembre al finalizar una actividad de campaña por los comicios legislativas del 06 de diciembre”, señala el citado portal de investigación.

En otro tuit explica que “en 2015 ‘El Malony’ era cabecilla de una banda a la sombra de ‘El Picure’ (principal pran de la zona). Según un detenido por el crimen ‘La Crema’ quería dominar todas las obras en Altagracia -petroleras y construcciones-. Pero ese ‘negocio’ lo quería ‘El Malony’ en exclusiva”.

Según confesiones de los delincuentes involucrados en el crimen, “fue un problema personal entre ‘El Malony’ y ‘La Crema’”.

La Tabla explica que “los sindicatos de la construcción tienen derecho a suministrar 75% del personal, lo cual se ha convertido en un jugoso negocio. Cobran a los trabajadores que ingresan y, además, mantienen puestos de delegados sindicales que reciben su pago de las contratistas”.

El dirigente adeco, quien “tenía control de las obras de la planta termoeléctrica Ezequiel Zamora y disputaba otros contratos”, estuvo preso “por el asesinato de dos hombres” en Guárico.

(LaIguana.TV)