Este lunes 6 de noviembre el analista político Luis Vicente León compartió en Twitter sus proyecciones económicas para Venezuela en 2022. Según el experto, el venidero año habrá crecimiento económico, trocará fin la hiperinflación e incluso amainará la llamada inflación en dólares.

León puntualizó que si bien comparte el criterio de otros especialistas, que han apuntado a un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en torno al 5%, «esta proyección no puede considerarse cuantitativamente relevante, luego de haber perdido tres cuartas partes del PIB desde 2013».

No obstante, matiza que «es cualitativamente fundamental», en tanto es indicio de cambios en «el ambiente económico» que serían de particular relevancia «para el sector privado».

Con respecto a la hiperinflación, el también director de la firma Datanálisis asegura que la tendencia actual apunta hacia el fin del ciclo hiperinflacionario, aunque el costo de la vida seguirá siendo muy superior «a la media internacional», sin que precisara cuál es este valor ni cuál es la inflación esperada en Venezuela el próximo año.

Sin embargo, independientemente del valor específico que adopte este indicador, si sus previsiones se cumplen, vaticina que «la inflación interna ayudará a reducir la sobrevaluación cambiaria, producida fundamentalmente por el diferencial entre inflación y devaluación», lo que traerá aparejada una disminución del crecimiento de los precios en dólares.

De otro lado, en relación con la política económica adelantada por el Gobierno del presidente Nicolás Maduro, León sostuvo que «su acción económica estará presionada hacia la apertura (cambiaria, precios e inversión privada)», aun cuando no prevé que ocurran cambios relevantes dentro de su administración.

En lo tocante a la política monetaria, el también economista proyecta que el Banco Central de Venezuela (BCV) adelantará esfuerzos –en su decir, «con poca probabilidad de éxito»– para «mantener vivo el bolívar» frente a «la masificación imparable del dólar en todo el país».

A pesar de esto, asevera que aunque no parece posible revertir la dolarización de facto, las medidas tomadas por el BCV impedirán «que el dólar absorba el 100% de las transacciones comerciales», que «podrían estancarse en alrededor del 70% actual».

En consideración a la actividad crediticia, el especialista se aventura a decir que se mantendrán las restricciones derivadas de los «encajes –legales– altos» y la imposibilidad de bancarizar plenamente el dólar en las instituciones financieras nacionales.

Para él, esto –en conjunto con «los problemas de infraestructura»– representa un obstáculo para «el crecimiento del aparato productivo». Aún así, estima que aparecerán «mecanismos de financiamiento no convencionales», si bien serán «menos eficientes y más costosos».

A pesar de lo dicho previamente, León remarcó que en 2022 no es previsible «una recuperación relevante ni un desarrollo real», pese a que el período se anuncia como «un punto de inflexión moderadamente» conveniente tanto para privados, que tendrán mayor capacidad de operar, como para los consumidores, «que no enfrentarán desabastecimiento relevante».

Como colofón a sus reflexiones, se preguntó cuál sería la estrategia del gobierno de Estados Unidos «frente a esta realidad económica». En su opinión, es claro que la administración Biden mantendrá «el rechazo total a Maduro», pero no luce tan claro si Washington optará por continuar con «las restricciones que afectan la producción» y la «infraestructura» aunque ello no implique la salida del mandatario o bien apostará por ofrecer cierto «margen de maniobra».

(LaIguana.TV)