Este jueves 11 de mayo, mediante un artículo titulado «Vislumbre», el humorista venezolano Laureano Márquez consideró que en Venezuela «algo» se está terminando, y que sus ciudadanos solo serán capaces de renacer si «asumen el compromiso». «si logramos dar ese paso el florecimiento vendrá, porque inteligencia es lo que aquí sobra», asevera el también politólogo, empleando un evidente doble sentido.
«Vislumbro que Venezuela va a renacer si somos capaces de asumir el compromiso. Si lo sabemos hacer como es, sorprenderemos al mundo con nuestro brillo. Las nobles aspiraciones no son otra cosa que hacer coherente el país que se sueña con el que se practica cada día, el compromiso ético con la honestidad», indica Márquez.
En el referido texto, publicado por el semanario Tal Cual, el humorista compara la situación actual del país con la que se vivió en España durante el «nefasto» reinado de Enrique IV, mejor conocido como «el impotente». Después de que acabe el actual gobierno, destaca, Venezuela se unificará, al igual que lo hizo la península ibérica cuando llegó al poder la reina Isabel.
«Así como la noche está irremediablemente condenada por la salida del sol, a los regímenes fracasados solo les queda la fuerza para sostenerse, pero hasta el uso de la fuerza agota», enfatiza.
«Al que reparte palos todo el día se le cansa el brazo y no llega a la casa con ganas de abrazar a su esposa. Al que se pasa todo el día lanzando ‘gas del bueno’, algo también le llega a él; y al que tiene hijos adolescentes, en una refriega con el enemigo se le puede presentar la duda de si aquel con la franela en la cabeza al que le lanzó un perdigonazo no sería su hijo», acota, permitiéndose comparar en este punto a los militares bolivarianos con los soldados nazis.
«Algo se termina en Venezuela y se vislumbra algo diferente. La neblina de los gases no deja ver bien todavía qué será, pero la historia no es una reflexión inútil; el conocimiento del pasado es como una lámpara sobre el oscuro presente, que nos ayuda también a vislumbrar cómo podría ser y, especialmente, cómo valdría la pena que fuera», precisa Márquez en otra parte del artículo.
(LaIguana.TV)
