Los departamentos de Seguridad Nacional y de Justicia en EEUU están preparando una normativa que dificultará la solicitud de asilo para miles de personas, ya que impediría que se acojan a esta figura quienes crucen la frontera ilegalmente o no soliciten la protección en otras naciones.
La norma facilita la deportación de las personas que cruzan la frontera y piden asilo, pues, al hacerlo de modo ilegal, perderían el derecho de acogerse a esta protección. Según reseña el diario San Diego Union Tribune, fuentes de la Casa Blanca explicaron la semana pasada que la normativa tiene la intención de “llenar el vacío” legal que surgirá tras el posible fin del título 42 el próximo mayo, después de que el congreso no haya tomado “ninguna medida que garantice la gestión segura y humana de los migrantes”.
De entrar en vigor, esta sería una de las normativas migratorias más restrictivas en todo el gobierno de Joe Biden, quien llegó a la presidencia abanderándose en que sería distinto al racismo explícito republicano y luego de haber eliminado muchas de las medidas migratorias excluyentes de la administración de Donald Trump (2017-2021).
Parece que a Biden la galantería no le duró demasiado, aunque las fuentes oficiales de su administración quieran desmarcarse de esta norma asegurando que “no está prohibiendo el acceso al asilo, como lo hizo la administración anterior”; lo prohibirá de forma distinta, cargarán contra los que ingresen de forma ilegal, como si este no fuera el problema migratorio histórico: la ilegalidad.
En esta nueva entrega de Entre Líneas ampliamos detalles de estas propuestas en materia migratoria, sus defensores y detractores y de algunas alternativas en favor de la comunidad latina en EEUU.
(LaIguana.TV)
