A propósito de las actuaciones que se han emprendido contra la corrupción, este lunes 20 de marzo, el presidente Nicolas Maduro destacó que corresponde al Estado garantizar que prevalezca la justicia y que el pueblo conozca la verdad.

«Nada ni nadie nos va a detener en la voluntad y el empeño de castigar a esta mafia de hacer justicia», sentenció el mandatario durante una reunión de trabajo con el Buró Político Ampliado de la Revolución Bolivariana desde el Hotel Humboldt, en Caracas.

Explicó que han «asumido una posición vertical, frontal, absoluta de lucha contra la corrupción y los corruptos, contra el bandidaje y los que roban al pueblo, estén donde estén, vengan de donde vengan».

Informó además que junto a la Policía Nacional Anticorrupción, el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y los otros cuerpos del Estado, ha conducido personalmente todas las investigaciones «para desmembrar estas mafias de corrupción que se han enquistado en importantes sectores del aparato económico, judicial y político de Venezuela».

Maduro enfatizó que la Operación Especial Anticorrupción permitió perpetrarle un «primer golpe poderoso a las mafias» y afirmó que tiene «la absoluta voluntad y decisión de ir hasta la raíz misma para desmembrar todas estas mafias» que se han descubierto en las pesquisas.

El gobernante reveló que mediante información de diversas fuentes que llegaron a mediados del pasado octubre y noviembre obtuvieron «resultados preliminares de las primeras averiguaciones que se hicieron, los primeros descubrimientos arrojaron pistas importantes de los mecanismos de funcionamiento de estas mafias.

Entre las instituciones involucradas figuran la estatal Petróleos de Venezuela, algunas alcaldías, la Superintendencia Nacional de Criptoactivos y de otros casos como el de venta de sentencias para favorecer a narcotraficantes, delincuentes y paramilitares dentro del Poder Judicial de Caracas.

«Nuestra revolución nació como una respuesta a la descomposición moral del antiguo régimen de la Cuarta República, como una alternativa a la descomposición moral, desmoralización colectiva del modelo capitalista-neoliberal y de capitalismo dominado por las oligarquías internas. Hemos sido y tenemos que seguir siendo una alternativa de ética, moral y política frente al bandidaje. Tenemos que ser una realidad de profunda honestidad en el manejo de los recursos públicos que le pertenecen a nuestro pueblo, sobre todo en tiempos de guerra económica», concluyó.

(LaIguana.TV)