Algunos exfuncionarios venezolanos investigados e imputados en Venezuela por su presunta participación en actos de corrupción son protegidos por los gobiernos de Estados Unidos y de algunos países europeos, que les han otorgado residencia y les han garantizado un estilo de vida ostentoso, denunció este lunes el primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela, Diosdado Cabello.

«No es nueva la protección de Estados Unidos a terroristas, a ladrones, a corruptos. Viven allá a cuerpo de reyes y los protegen en Estados Unidos o en Europa», manifestó en la tradicional rueda de prensa semanal de la tolda roja.

El dirigente socialista avanzó estas opiniones tras ser consultado sobre el respaldo que ofreciera Washington a la lucha contra la corrupción encabezada por el presidente Nicolás Maduro.

«A nosotros nos han acusado de cualquier cantidad de barbaridades. Por eso nos resulta contradictorio que ellos vengan a decir que acompañan [la lucha contra la corrupción]. Lo bueno de esa respuesta es que dicen que la iniciativa es del presidente de la República, Nicolás Maduro Moros. Lo reconoce Estados Unidos. Me imagino que van a despedir al vocero ese de la Casa Blanca», alegó.

Cabello reiteró que tras ese presunto apoyo, la administración Biden pretendería «tener la lista» de personas a las que tendría que «proteger», para lo que apeló a las declaraciones de otros exfuncionarios venezolanos de alto nivel que han expresado públicamente su repudio a las prácticas dolosas, a pesar de que esa fue la razón por la que se evadieron de la justicia venezolana.

«Algo bueno también es que esos son los que salen a declarar, a hablar de corrupción, los que se fueron de Venezuela por corruptos. Y hace cuatro, cinco o diez años que se fueron, la misma oposición decía que eran unos corruptos, ahora son compinches, amigos», expresó.

A su parecer, es poco probable que el gobierno estadounidense admita que sus acciones y discursos en torno a la corrupción dentro de Venezuela son contradictorios, porque sus dirigentes son «muy arrogantes».

«La arrogancia de los Estados Unidos no les permite ver cuándo se equivocan, cuándo tienen que corregir, cuándo tienen que cambiar. Da tristeza, porque las consecuencias de esos errores, de esas equivocaciones, las sufren seres humanos», añadió.

(LaIguana.TV)