El Congreso de Estados Unidos envió una nota al secretario de Estado, Antony Blinken, y al embajador de ese país en la Organización de Estados Americanos (OEA), Francisco O. Mora, en la que se les pide ampliar la investigación independiente que se está realizando sobre el accionar del secretario general de la OEA, el uruguayo Luis Almagro.

En la misiva, que difundió MVD Noticias, se apoya la investigación independiente “sobre las más recientes acusaciones de infracciones éticas e irregularidades que podría haber cometido” Almagro. Esto hace referencia a la investigación interna del organismo que enfrenta Almagro por mantener una relación con una funcionaria, según reportó en octubre del año pasado The Associated Press.

“Sin embargo, creemos que el alcance de esta investigación es totalmente insuficiente”, señala la carta del Congreso de Estados Unidos. Se indica que tienen conocimiento de “otras acusaciones muy creíbles que implican actos ilícitos mucho más atroces y perjudiciales”. En este sentido, aseguran que es “imperativo” que se apoyen “inmediatamente las investigaciones sobre estas acusaciones adicionales”.

En la carta detallan uno a uno los puntos que creen que deberían ser sumados a la investigación contra el uruguayo. El primero de ellos refiere a la actuación de Almagro al disolver la Misión Contra la Corrupción y la Impunidad en Honduras. Según se recuerda, los integrantes de la misión renunciaron y acusaron a Almagro de “debilitar su labor” y de tener un “pacto de impunidad” con el expresidente Juan Orlando Hernández, que ahora se encuentra esperando un juicio por cargos de narcotráfico y armas.

Sobre este punto también marcan algunas irregularidades administrativas, como el hecho de que varios empleados de la Misión que fueron contratados por Almagro tenían sede en Washington y “no participaban en el trabajo de la Misión, lo que suscitaba inquietud acerca de un posible fraude en las nóminas”.

Otro de los puntos que el Congreso de Estados Unidos cree pertinente investigar implica las declaraciones de Almagro sobre las elecciones en Bolivia en 2019. En ese momento, el uruguayo aseguró que hubo fraude electoral y “exacerbó una grave crisis política y la destitución forzosa del presidente electo del país” Evo Morales. Esas acusaciones luego fueron desestimadas, lo que derivó en pedidos a la OEA de realizar una revisión independiente de las afirmaciones de Almagro, algo que el secretario general ha contradicho.

Finalmente, se pide investigar la negativa de Almagro de recontratar al secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Paulo Abrão, a pesar de que tenía el respaldo de la comisión. “La decisión de Almagro fue denunciada por líderes de derechos humanos y calificada de ataque a la ‘independencia y autonomía’ de la comisión por los propios miembros de la CIDH”, recuerda la misiva.

Asimismo, se señala que “dentro de la comunidad de derechos humanos de la región, se sospechó ampliamente que la actuación de Almagro se había llevado a cabo en nombre de gobiernos regionales resentidos por las denuncias de la Comisión de violaciones de derechos humanos dentro de sus jurisdicciones”.

(ladiaria.com.uy)