Carlos Caicedo confirmó este miércoles 5 de diciembre que el cadáver encontrado en días recientes en avanzado estado de descomposición en una zona boscosa del barrio de San José de San Antonio de Escazú, Costa Rica, es el de su hija Carla Stefaniak, la joven venezolana-estadounidense que fue reportada como desaparecida a finales de noviembre.
“Me tocó el paso más difícil que fue identificarla. Ver un cadáver en las condiciones de descomposición y marcas que dejó la persona que la sacó de este mundo, es terrible. Espero que le caiga todo el peso de la ley”, manifestó Caicedo.
Relató que Stefaniak, de 36 años, viajó desde Estados Unidos al referido país centroamericano para pasar unas cortas vacaciones. “Mi hija vino a hacer turismo y fue asesinada de la peor forma: con ensañamiento. El cuerpo es el de ella“, expresó.
“Ella creía que Costa Rica era un país seguro y miren que ironía, en este país encontró la muerte. Yo no sé si el Gobierno entiende la repercusión que puede tener la muerte de Carlita, porque este país vive del turismo. Esto se les está yendo de las manos en control migratorio y delincuencia”, dijo.
Las autoridades que llevan adelante la investigación del caso, señalaron que todo apunta a que el móvil del asesinato fue un ataque sexual. Un ciudadano nicaragüense, identificado como Bismark Espinoza Martínez (32), permanece detenido por ser el principal sospechoso.
La víctima llegó a Costa Rica el pasado 22 de noviembre, seis días después debió regresar a la ciudad de Miami donde vivía. Al no regresar y no contestar los mensajes de texto sus familiares la reportaron como desaparecida.
(LaIguana.TV)
