El exlíder guerrillero colombiano Jesús Santrich sufrió un paro cardiorespiratorio, como consecuencia de una alta dosis de medicamento suministrada por el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec).

 

Así lo informó este sábado su abogado, Gustavo Gallardo, durante una entrevista concedida a un medio local, en la cual señaló que el estado de salud actual de Santrich es delicado.

 

De acuerdo con Gallardo, el excombatiente, al enterarse de que sería extraditado de manera arbitraria por parte del Ejecutivo, asumió la decisión de cortarse los brazos. «Lo hizo de manera consciente, de manera clara, y lo hizo efectivamente para evitar a toda costa su extradición y que esto terminara con acabar con el proceso de paz», precisó.

 

Recordemos que Santrich, quien permanecía en la cárcel La Picota desde abril de 2018 en el marco de un proceso de extradición a Estados Unidos, acusado por delitos de narcotráfico, recibió el pasado 15 de mayo el beneficio de garantía de no extradición y su libertad inmediata, por parte de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP).

 

No obstante, el pasado viernes aún permanecía detenido, razón por la cual decidió infligirse heridas en los brazos dentro de su celda, que fueron atendidas por personal médico.

 

Poco después el Tribunal Superior de Bogotá ordenó su salida de la prisión, pero cuando se retiraba del lugar fue abordado por agentes del Cuerpo Técnico de Investigaciones (CTI) de la Fiscalía, quienes lo recapturaron.

 

Actualmente, el exguerrillero permanece internado en una clínica, bajo un fuerte esquema de seguridad para evitar que atente contra su vida.

(LaIguana.TV)