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Dotar de información al pueblo lo protege de la propaganda de guerra, afirmó este miércoles el ministro del Poder Popular para la Comunicación y la Información, Ernesto Villegas.  Es la respuesta del funcionario ante la pregunta sobre el efecto de estos ataques en la población, durante una rueda de prensa junto a la Canciller Delcy Rodríguez, en Caracas, para presentar pruebas de la feroz campaña mediática contra Venezuela.

 

“Busca la desarticulación de nuestras sociedades. Un país sometido a la propaganda de guerra es un país sometido a la siembra de angustia, de incertidumbre, de desconfianza hacia las autoridades, hacia su existencia como nación”, advirtió.

 

La respuesta debe de ser integradora que sólo se consigue reduciendo los niveles de incertidumbre y con mayor información, por eso la contraofensiva, desde el campo de la comunicación, tiene que ver con aportar la mayor cantidad de datos posibles para que el ciudadano común pueda discernir entre lo que es falso y verdadero, explicó Villegas.

 

En este sentido, citó un antecedente que involucra al mismo Departamento del Tesoro de Estados Unidos:

 

En los años 90 en Venezuela se desarrolló la llamada Operación Casa Blanca, una operación compleja de lavado de dinero que desplegó el Departamento del Tesoro con varias agencias del gobierno estadounidense que terminó con el señalamiento de una funcionaria venezolana del gobierno de Rafael Caldera, como partícipe de una red de narcolavado. Era Esperanza Matos, gerente del Banco Industrial de Venezuela en Miami, hermana del exministro de Hacienda de Rafael Caldera, Luis Raúl Matos Azócar.

 

“La compatriota resultó señalada por estas mismas agencias que hoy señalan a nuestro Vicepresidente Tareck El Aissami, como incurso en prácticas ilícitas” relacionadas presuntamente con el narcotráfico.

 

El Ministro Villegas recordó que en aquel entonces esa campaña se mostró señalando la culpabilidad de la funcionaria venezolana, sin derecho a la defensa. Se le condenó mediáticamente.

 

(tves.gob.ve)