Los argentinos tienen este domingo 27 de octubre la oportunidad de elegir a un nuevo presidente, en un momento de crisis económica que ha generado gran descontento social. En Uruguay, el llamado también es el de renovar la presidencia, con la continuidad del oficialismo como favorita, mientras que en Colombia la cita es más local, para elegir a nuevos alcaldes y gobernadores.
Si bien, gran parte de la atención de la región está sobre Argentina, la tercera economía de Latinoamérica, donde el presidente conservador Mauricio Macri está relegado en las encuestas, por detrás del candidato peronista Alberto Fernández.
Quien fuera una figura en las sombras surgió en los últimos seis meses para mostrarse como el favorito para estos comicios, con más del 50% de los votos de acuerdo con los sondeos, algo que evitaría una segunda vuelta. Alberto Fernández cuenta además con la poderosa carta de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien ya estuvo al frente de Argentina entre 2007 y 2015.
Se trata de una dupla que amenaza seriamente las aspiraciones de reelección de Macri, cuyo mandato ha terminado marcado por una fuerte crisis económica cuando había prometido una mejora. Una tercera parte del país es pobre, la tasa de desempleo es del 10,6% y se espera que la inflación llegue al 55% este año. Además, está previsto que la economía se contraiga un 3,1%.
“Vamos a tener que seguir enfrentando desafíos que resolver, pero traer a los mismo del pasado no nos va a ayudar nada”, decía el pasado 24 de octubre el presidente, durante su cierre de campaña en Córdoba. Su rival, Alberto Fernández, afirmaba en Mar del Plata que el domingo “tenemos que empezar a dar vuelta a una página oprobiosa que empezó a escribirse el 10 de diciembre de 2015”, en referencia a la fecha de posesión de Macri.
Son dos contrastes. Macri ha conseguido abrir el país a los mercados internacionales, pero bajo la sombra de haber recurrido a un préstamo de 56.000 millones de dólares del Fondo Monetario Internacional (FMI). Mientras tanto, Fernández defiende una economía que tenga como pilar el consumo nacional. “La economía argentina es una que consume el 70% de los que produce”, declaró el candidato en septiembre.
Unas elecciones disputadas en Uruguay sin un claro ganador
En Uruguay, está en juego la continuidad del Frente Amplio, una coalición de izquierda que gobierna desde el 2005. Su candidato, Daniel Martínez, lidera las encuestas con una intención de voto del 40%, seguido del exsenador Luis Lacalle Pou, del centroderechista Partido Nacional, a quien las encuestas dan el 28% de las papeletas.
Son unas estimaciones que hacen prever una segunda vuelta en la que jugarían un papel crucial las otras fuerzas, al no ser tan amplia la diferencia entre los dos rivales. Es ahí donde Lacalle Pou ya cuenta con cierta ventaja, ya que el Partido Colorado y Cabildo Abierto le han ofrecido su apoyo, que juntos llegaría al 24% de los votos.
El vencedor asumirá un país de 3,5 millones de personas que ha visto un repunte de la inseguridad. El año pasado, en 2018, se registraron 414 homicidios, una cifra récord que supone un alza del 45% sobre el 2017. De ahí que este haya sido uno de los temas principales de campaña. La economía también ha estado en la agenda, frente a un desempleo del 9% y un lento crecimiento.
Los uruguayos también renovarán el Congreso con 99 escaños en liza en la Cámara de Diputados y 30 en la de Senadores.
El partido FARC acude a una cita inédita en las urnas
En Colombia, el llamado es para elegir a alcaldes, gobernadores y representantes locales. Y es que son las primeras elecciones de este tipo, que cuentan con la participación del partido político FARC, fruto de un acuerdo de paz histórico con la exguerrilla del mismo nombre.
Hasta ahora la única experiencia de esta formación en las urnas fue en los comicios legislativos del año pasado, cuando consiguieron apenas 55.400 votos. En esta ocasión, están inscritos a 16 alcaldías, una cuota muy baja que apenas representa al 1,5% de todos los consistorios en disputa.
Los días previos a esta votación estuvieron marcados por el asesinato de Alexander Parra, un antiguo combatiente que murió a tiros el 24 de octubre en un Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación. Se trata de una zona en donde aquellos que dejaron las armas hoy se reincorporan a la vida civil.
Parra era esposo de una candidata al concejo de Mesetas, una región del centro del país, que era un antiguo bastión de la guerrilla. Con este, ya son más de 170 los exguerrilleros muertos tras la firma de los acuerdos, según la FARC.
(Agencias)
