La idea de hacer creer que esta teoría ha dado pie para que Guaidó anuncie una reunión, el próximo 3 de diciembre, «del órgano de consulta del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (Tiar)«, en la cual —según empresas de comunicación vinculadas a Guaidó aseguran— sus «representantes» «junto con los miembros de la comunidad internacional compartirán información de inteligencia con los países vecinos» para «implementar mayor presión sobre el régimen de Nicolás Maduro».
La reunión se realizará en Colombia, país que ha ordenado detener y expulsar a todo migrante que no tenga documentos y que bajo esa premisa ya ha perseguido y botado de su país a por lo menos 80 ciudadanos de origen venezolano, a quienes inculpan de participar en «vandalismo» y «violencia» en las protestas masivas generadas en Colombia por el rechazo popular contra el régimen de Iván Duque.
De acuerdo al contenido presentado por estas empresas comunicacionales, la reunión «representa una nueva oportunidad de luchar contra el régimen» pues en ella «se discutirán también casos en los que el régimen ha estado involucrado para desestabilizar a la región latinoamericana».
«Hemos detectado pequeñas células violentas infiltradas en las diferentes protestas realizadas en países como Colombia y Chile», aseguró Guaidó.